"El sexo es un factor a valorar para que podamos tener un cine plural, enriquecedor y diverso", señalan desde CIMA
MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA) mostró hoy su "absoluto" desacuerdo con las medidas de acción positiva que contempla la Orden ministerial por la que se regularán las ayudas al cine, que ha frenado la Comisión Europea a la espera de que el Ministerio de Cultura aclare si la Orden que las regula vulnera o no la legislación comunitaria. CIMA considera que el texto podría ser "ilegal" porque propone medidas contrarias al principio de igualdad.
En un comunicado, CIMA señala que el articulado de la Orden "podría implicar una situación de ilegalidad" y destaca que existen sentencias previas en las que las medidas que establecen una promoción automática de las mujeres situadas en una posición 'objetiva' de igualdad con los hombres, "han sido declaradas contrarias al derecho comunitario".
"Consideramos lamentable una articulación que conlleva un impacto negativo en la sensibilización respecto a la desigualdad de los profesionales del cine", señalan las mujeres del cine y el audiovisual, agregando que el articulado "tiene un efecto negativo al estar basado en la preferencia automática del proyecto de un sexo sobre el otro en caso de empate". "El sexo no es un factor dirimente, es un factor a valorar para que podamos tener un cine plural, enriquecedor y diverso", apuntan.
Para CIMA, que la Orden contemple que entre dos proyectos empatados por las ayudas se dé preferencia al que cuente con una mujer como directora o autora del guión, es "la peor opción" y "la más subjetiva y discrecional". "Su diseño la hace prácticamente inaplicable y es susceptible de ser totalmente ineficaz ya que marca un máximo pero no un mínimo", detallan, recordando que si se llegara a aplicar "podría surgir dudas de legalidad respecto a los solicitantes masculinos, al establecer una preferencia incondicional".
ENFRENTA A HOMBRES Y MUJERES
Ante esta situación de "discriminación real", según CIMA, "no se puede aplicar una acción positiva potencial". "Necesitamos medidas tan reales y actualizadas como la discriminación, pero también medidas realmente aplicables y eficaces", contemplan, preguntándose "¿por qué se enfrenta a hombres y mujeres, dejando claro que los dos proyectos tienen la misma calidad, pero que por 'sexo' se elige el de la mujer?".
Por todo esto, CIMA solicita "medidas de apoyo concretas, con puntuaciones tasadas, más objetibables y controlables, compatibles con el principio de igualdad". Pide, además que las películas con más de un 60 por ciento de participación femenina (en la dirección, guión y/o producción) obtengan 5 puntos extras (8 puntos si se dan dos casos de éstos y 10 si se dan los tres).
También propone que se puntúe a las guionistas en las ayudas para la elaboración de guiones de largometrajes; que en las ayudas a la amortización complementaria se otorguen 4 puntos si existe en el equipo del filme una composición "equilibrada" de mujeres y hombres entre los responsables de los equipos técnicos "en las categorías profesionales en las que actualmente las mujeres están infrarrepresentadas", así como en la participación de actrices y actores protagonistas. Asimismo, quieren que se nombren en femenino las categorías profesionales que aparecen en la normativa.