MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
La actriz Natalia de Molina encarna el dolor y la dignidad en 'Techo y comida', la ópera prima de Juan Miguel del Castillo, quien narra la situación de una madre soltera y sin trabajo que hace frente a la amenaza de perder el piso de alquiler en el que vive.
Según ha señalado el director durante una entrevista concedida a Europa Press, este filme, que se estrena este viernes en los cines españoles, muestra una situación a su juicio silenciada con el fin de "despertar la conciencia dormida".
En esta película, Natalia de Molina da vida a Rocío, una madre soltera y sin trabajo, que apenas tiene dinero para comer. Ante el miedo de perder la tutela de Adrián, intenta aparentar que ambos viven una vida normal. Sin embargo, su casero, también agobiado por las deudas, denuncia el impago del alquiler y Rocío se ve obligada a encontrar una solución.
Del Castillo ha explicado que esta película se inspira en un caso real de una vecina, quien "de vez en cuando" le pedía leche y algún alimento y que un día desapareció a causa de un desahucio.
El cineasta reconoce que la realidad puede ser aún más dura, y que incluso en algunos pases varias ONG como Cruz Roja reconocieron que se había "quedado corto". Sin embargo, ha precisado que lo que él quería era "contar lo mínimo para despertar la conciencia dormida" y "llegar a lo más hondo".
"No quería caer en el sentimentalismo y en la lagrima fácil o empalagosa. Es una cinta muy dura, pero he contado lo mínimo para invitar a una reflexión sobre este mensaje social y los dilemas que presenta", ha dicho.
En cuanto a la elección de Natalia de Molina para protagonizar este filme, ha señalado que reunía varias características: "Tiene cierta fragilidad, juventud y es andaluza". Tal y como ha explicado, Rocío es "una persona muy fuerte" que "intenta no desmoronarse". "La dignidad es lo primero, no le cuenta a nadie lo que sucede, eso se carga en el personaje", añade.
NATALIA DE MOLINA
De Molina, Goya a la Mejor Actriz Revelación en 2014 por su interpretación en la película 'Vivir es fácil con los ojos cerrados', ha confesado a Europa Press que se emocionó al leer el guion de 'Techo y comida' y ha admitido que sintió "ciertos miedos" porque se trataba de una "responsabilidad muy grande". De hecho, ha resaltado que se trata del papel más importante que ha realizado en su carrera.
Para trabajar en este papel, la actriz se centró en no llevar a Rocío a un lado "más sensiblero", sino en retratar a "alguien que vive en soledad con mucha soledad y miedo pero que es muy digna. "Puede verse como un personaje agrio, porque es una persona dura que sufre y que tiene una coraza", ha dicho.
En el proceso de preparación, De Molina habló con varias asociaciones e incluso conoció a una mujer que se encontraba en una situación similar. "Hay muchas Rocíos ahí fuera. Todos hablan de la dureza de la película, pero es necesaria y se agradece haber dado visibilidad a gente que parece invisible para la sociedad", ha indicado.
Preguntada por una posible nominación a los Goya, De Molina precisa que "las películas no se hacen para ganar premios sino para el público".