MADRID, 15 Oct. (EDIZIONES) -
Uno de los finales más apoteósicos de la historia del cine es 2001: Una odisea en el espacio. La obra maestra de Stanley Kubrick tiene ese honor, pero también el ser uno de los finales más misteriosos vistos en el cine. No obstante, parece que eso tiene arreglo.
El canal de YouTube Cinefix decidió comparar la novela original, escrita por Arthur C. Clarke con el filme de Kubrick. El libro se escribió paralelamente al largometraje, con lo cual, hubo puntos en los que se diferenciaban claramente. Aparte de ello, hay que destacar el final, que en el novela es diferente pero que, curiosamente, puede explicar el final de la película, que a día de hoy despierta encendidas discusiones cinéfilas.
Precisamente, el final de la novela muestra a David Bowman, tras haber atravesado una especie de túnel que le lleva a una suite de hotel elegante y de estilo Luis XVI y, al dormirse, su cuerpo y su mente son drenadas de su cuerpo para convertirse en un nuevo ser que vive y viaja por el espacio, convirtiéndose en un hijo de las Estrellas, que regresa a la Tierra para explotar armas nucleares que fueron disparadas.
De esa manera, se explica el destino de Bowman y que en la película de Kubrick se vislumbra, aunque de una manera más sutil y misteriosa. Se convierte en un ente superior, logrando un poder que va más allá del humano, semejante a un tipo de nirvana. En ese sentido, la novela logra explicar ese ambiguo mensaje que dejaban las últimas imágenes de la obra maestra de Kubrick.
UNA OBRA MAESTRA
2001: Una odisea en el espacio es considerada una de las grandes película del género de la ciencia ficción y clara inspiradora de otros largometrajes de gran prestigio como Alien, el octavo pasajero, Blade Runner o Star Wars y siendo influencia de realizadores como George Lucas, Ridley Scott o Christopher Nolan.
No sólo ha sido una influencia en el séptimo arte, tal fue la repercusión y el prestigio de la cinta, considerada una de las cintas de ciencia ficción más respetuosas con las leyes de la física, que logró que mucha gente se decidiese a estudiar carreras científicas.
Ganadora de un premio Oscar y anexada en el Registro Nacional de Grabaciones de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos en 1991 por su "significancia cultural o histórica", es considerada una de las grandes obras maestras de la historia del cine.