Oscar 2018: La estatua de Harvey Weinstein en batín revoluciona la previa de la gala

MADRID, 2 Mar. (EDIZIONES) -

La semana de los Oscar suele estar repleta de eventos y actividades relacionados con el cine en la ciudad de Los Ángeles. Sin embargo, nadie esperaba que la meca del cine amaneciese a escasos tres días de la gran entrega de premios, con una curiosa estatua del personaje más controvertido de Hollywood en los últimos tiempos.

Efectivamente, se trata de Harvey Weinstein. El productor, cuya compañía está a punto de entrar en bancarrota y va a ser vendida por unos 500 millones de dólares tras las recurrentes denuncias por acoso y abuso sexual recibidas en los últimos meses, ha sido 'homenajeado' con una estatua dorada que ha aparecido en Hollywood Boulevard justo frente a la estrella de Elvis Presley.

La figura de oro muestra a Weinstein sentado en un sofá, vistiendo una bata de baño ligeramente abierta y sosteniendo un Oscar en su mano derecha. La ubicación de la estatua está en un lugar cercano al mítico Dolby Theatre, donde este domingo se llevará a cabo la tradicional gala de los Premios de la Academia.

Una obra que hace una clara referencia, comenzando por su título, a la cadencia del productor por el 'Casting Couch' o las 'audiciones de sofá', es decir, al acoso al que sometió a no pocas actrices valiéndose de su posición de poder en la industria.

Según recuerda ABC News, los artistas callejeros de Los Ángeles Plastic Jesus y Joshua 'Ginger' Monroe colaboraron en la creación de la escultura. Monroe ya fue noticia hace un par de años cuando se atribuyó la autoría de la estatua de un Donald Trump desnudo que apareció en varias ciudades de Estados Unidos en 2016.

Ahora, los turistas y habitantes de Los Ángeles no dejan de hacerse fotos con la estatua de Weinstein. Una de las últimas noticias acerca del denostado productor, más allá de la venta de su compañía a un fondo de inversión, fueron sus disculpas hacia Meryl Streep y Jennifer Lawrence después de que su abogado intentase usar sus testimonios -o simplemente la falta de acusaciones- como parte de la defensa contra su demanda colectiva de acoso sexual.