La película documental 'Las alas de la vida' describe la lucha por la dignidad ante la muerte

MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -

La película documental 'Las alas de la vida' describe la lucha por la dignidad en la vida y en la muerte, "con una sonrisa", según describe el protagonista en el film, Carlos Cristos. La cinta dirigida por Antoni P. Canet, que se presentó hoy en Madrid, se estrenará el 13 de abril en las salas españolas.

La idea de 'las alas de la vida' nació del propio Carlos Cristos, un médico que decidió, tras haber sido diagnosticado de atrofia sistémica múltiple (A.M.S), proponerle a su amigo, el cineasta Antoni P. Canet, que filmase los avances que esta enfermedad neurodegenerativa, invalidente y mortal. "No fue una decisión fácil", declaró Canet, que confesó que "pasaron varios meses desde que Carlos me hizo la propuesta hasta que acepté".

En la película, al mismo tiempo que se descubre el avance de la A.M.S en el cuerpo de Carlos, se hace repaso a su vida, a su faceta de músico, compositor y hasta de inventor. Su vocación por la medicina adquiere especial relevancia en 'Las alas de la vida', que le llevó incluso a abandonar por un tiempo su trabajo como médico de familia, para cooperar en África.

Un sin fin de personajes secundarios "enriquecen la historia", comentó Canet. El director reconoce que "los papeles fuertes" que ostentan las mujeres que transitan la escena, como el de Carmen Font, la mujer de Carlos, su madre o Teresa Cánaves, amiga que conoció en su época de cooperante en Ruanda, dan a la película un carácter que "no se conseguiría con actores", destacó Canet.

EL CORAZÓN NO ENTIENDE

A lo largo de la película, Cristos no abandona su fuerza para enfrentarse a la enfermedad y a asumir el inevitable final al que está abocado. "Lo entiendes con la cabeza, pero no con el corazón", reconoce en un momento del filme.

"Intenta ser feliz dentro de una desgracia", adujo Canet al referirse a la opción que tomo Carlos al conocer su enfermedad, algo que claramente se vislumbra en las imágenes del documental cuyo montaje "duró más de diez meses".

El rodaje fue especialmente duro para su mujer, que sentía que "se estaba haciendo una película fúnebre", que trataba más de la muerte que de la vida. "Uno no muere cada día", reconoció Font, quien comentó además que "el único afán de Carlos era conseguir que la película pudiera servir para algo".

SATISFACCIÓN FINAL

"Carlos está satisfecho con el resultado", manifestó Font quien explicó que actualmente su marido "desde que terminó el rodaje, ha empeorado bastante, sobre todo a nivel físico". A pesar de todo ello, Carlos está feliz al ver que "se va a cumplir el objetivo de que se transmitan las ideas para que la gente reflexione sobre un problema de salud tan importante", destacó Font.

El afán de Carlos se ha cumplido. Con esta película se transmite su idea, que en ningún momento intenta que tenga dueño, "lo importante es poner hijos en el mundo, no importa de quien sean", comentó Font recordando una frase que Carlos solía decir.

La cinta podrá verse antes de su estreno (el próximo 13 de abril), en la cadena de cines Renoir en la sesión matinal.