MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El director y cofundador del movimiento cinematográfico Dogma 95, Thomas Vinterberg (Dinamarca, 1969), vuelve a la gran pantalla con 'Kursk', una cinta que relata el trágico suceso del submarino nuclear K-141 Kursk, de la Armada Rusa, que en 2000 naufragó con 118 tripulantes a bordo. La operación de rescate internacional, en plena guerra fría, fracasó y no hubo sobrevivientes.
"El tema de los individuos contra la burocracia es algo cada vez más importante hoy en día. Para mi fue una fuente de inspiración ver a esos hombres que, aun enfrentados a la eternidad, siguen pensando en que pueden hacer por los demás en vez de pensar en sí mismos. A mi me educaron para pensar así en mi comuna socialista", ha expresado Vinterberg en una entrevista concedida a Europa Press con motivo del estreno de la cinta, el próximo 5 de diciembre.
'Kursk', protagonizada por Matthias Schoenaerts, Léa Seydoux y Colin Firth, está basada en el libro de Robert Moore en el que, además de investigar el trasfondo militar y político de la tragedia, ahonda en la emotiva historia de las familias que esperaban en tierra, de los esfuerzos desesperados de los rescatadores británicos, noruegos y rusos, y de los veintitrés marineros, atrapados en el compartimento de popa del submarino accidentado, esperando un rescate, mientras el mundo horrorizado seguía su lucha por mantenerse vivos.
El epicentro de la tensión de esta historia radica en una decisión que estuvo en manos del gobierno ruso. En este sentido, Vinterberg expresa que "aunque le enfada esa elección" la ve "muy complicada". "El sentido de comunidad que tienen los rusos es muy fuerte, y creo que la capacidad de sacrificar a uno por la comunidad es mayor. Si a eso le añades la responsabilidad y los secretos militares, se convierte en una elección muy difícil", ha explicado.
En cualquier caso, considera que si esta acción se hubiera realizado por parte de otro país "habría sido más escondida". "La CIA tiene la misma cantidad de sangre en las manos". Asimismo, ha desmentido los rumores entorno a esta película que dicen que Vinterberg no introdujo al personaje de Putin en ella por coacción del gobierno ruso. "Es una fake new, nunca tuve amenazas. Fue una decisión artística para hacer de la peli algo universal sobre la humanidad", ha explicado.
HÉROES REALES
En este punto, ha recalcado que decidió abordar el proyecto puesto que esta historia "es de héroes reales" y es necesario dar visibilidad a ello. "Se ha convertido en obligación hacer pelis de la muerte como parte de la vida, porque nadie quiere hablar de ello. Parece que ahora es un tema tabú, pero en esta historia se ve como hay personas que aun confrontadas a un final, siguen siendo valientes", ha dicho.
Así, precisa que tiene algo de tragedia griega con un sentido "de la catarsis al final de la historia". Una reflexión sobre lo que es capaz de hacer el ser humano para sobrevivir así como del valor de la vida "cuando estás a punto de perderla".
"Los seres humanos no aprendemos mucho, solo con la tecnología, para eso somos muy curiosos, pero la naturaleza humana es muy repetitiva. La gente no cambia, y con el paso del tiempo te crees que eres el único que lo hace, pero la verdad es que las personas no aprendemos. Es parte de la belleza del ser humano", ha concluido.