MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
"Creíamos que estábamos llegando muy lejos con el argumento, pero la realidad nos ha superado por todos los lados, nos hemos quedado muy cortos con lo que pasa en la película", ha manifestado este martes el cineasta Emilio Martínez-Lázaro, quien dirige 'Ocho apellidos catalanes', la secuela de 'Ocho apellidos vascos', que se estrena este viernes 20 de noviembre y suma en su reparto a Berto Romero y Rosa María Sardá, entre otros.
El director ha señalado durante una entrevista concedida a Europa Press que "la película es un universo en sí mismo" y, aunque "comparar con la realidad es inevitable", cree que cuando el espectador la vea "no le importará nada lo que diga Artur Mas". "Quizás cuando termine se acuerde de lo que leyó en los periódicos, pero mientras dura no", ha asegurado.
Preguntado por la coincidencia que existe entre el estreno y la actualidad política que vive Cataluña, Martínez-Lázaro ha reconocido que le gustaría que hubiese llegado en un contexto "más tranquilo", porque, a su juicio, "llega en un momento que llamaría jodido".
A pesar de que no cree que vaya a herir sensibilidades, puesto que no es su "intención", ve posible que haya quien "lo retuerza hasta conseguirse sentir herido y decirlo públicamente", tal y como se ha dicho "en las puñeteras redes sociales".
NUEVO ESCENARIO Y ENREDOS
En 'Ocho apellidos catalanes', Koldo (Elejalde) entra en crissi cuando se enterar de que su hija Amaia (Clara Lago), tras romper con Rafa, se ha enamorado de un catalán (Berto Romero). Por ello, decide cruzar la frontera de Euskadi y poner rumbo a Sevilla para convencer a Rafa de que deben viajar a Cataluña para rescatarla.
El reto en esta segunda parte, para la que Martínez-Lázaro espera un gran éxito, era no repetir la fórmula de la primera parte y conseguir una mejor película. Para ello, además del principal cambio del escenario vasco a uno catalán, se ha recurrido a situaciones de enredo, al humor físico y a una mayor complejidad en el conflicto de parejas: de una se pasa a tres.
También entran en juego nuevos personajes y culturas, aunque el director ha señalado que "siguen siendo importantes los vascos y andaluces".
En cuanto a una posible tercera parte, Martínez-Lázaro ha señalado que en la presentación de la primera no se pudo decir y que es pronto, aunque su "apuesta personal" es un "no" rotundo.
Preguntado por los Premios Goya, en los que el filme solo tuvo cuatro nominaciones, el cineasta es rotundo: "Se me importa una higa". "Una película contada en tono de farsa no es algo que la gente que tiene que premiar se sienta inclinada a hacerlo. El que vota se siente protagonista y elige películas que tratan de parados o de alzéihmer, y las comedias son algo que se queda detrás", ha indicado.
KARRA ELEJALDE Y CARMEN MACHI
Karra Elejalde y Carmen Machi repiten de nuevo en esta secuela que, a su juicio, no dañará la sensibilidad de quien la vea. En palabras del actor vasco, no tiene "miedo" acerca de cómo se vayan a sentir las personas más impregnadas de catalanismo" puesto que no ha habido intención de causar malestar.
"El resultado de esta película no se puede alejar a cómo se recibió la primera parte, por mucho que hayan cambiado las cosas desde que se empezó el rodaje", ha señalado a Europa Press en referencia al desafío independentista de Cataluña.
'Ocho apellidos vascos' fue nominada a cuatro premios Goya de los cuales consiguió tres. En este sentido, Elejalde ha señalado que habitualmente "la comedia no se premia" porque "parece un género menor", a pesar de que "es más difícil hacer reír que hacer llorar". En este sentido, Elejalde cree que fue "poco habitual" y "exagerado" el número de premios que consiguió el filme, mientras que Machi ha añadido que el premio es "el público", responsable de que cinta se convirtiera en "un hito".
En cuanto al éxito de la cinta, la película española más taquillera de la historia, Elejalde ha confesado que le abruma y ha señalado que no estaría dispuesto a una tercera película. "Acabas siendo chanquete toda la vida. La cosa del vasco la hice en su tiempo, pero tiene que acabar. Me da miedo abonar tanto este personaje", ha recalcado.