SGAE reclama políticas estables para lograr una mayor internacionalización de la danza: "España se vacía de danza"

   MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

   La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha reivindicado la puesta en marcha de políticas estables para lograr una mayor internacionalización de la danza y ha puesto en valor el patrimonio coreográfico de España con motivo del Día Internacional de la Danza, que se celebra este sábado 29 de abril, según han anunciado en un comunicado.

   Según los últimos datos disponibles del Anuario SGAE, la actividad de la danza en el conjunto del Estado español mostró una "mejora" tanto en el número de representaciones como de público. Sin embargo --y a falta de conocer los datos definitivos de 2022--, añade que la recuperación de 2021 crece a un ritmo "menor" que la subida experimentada por el teatro.

   En concreto, en 2021 se realizaron 1.534 funciones de danza, lo que supuso un 4,2% del total de las representaciones de artes escénicas (36.609). Asimismo, de las obras de artes escénicas que se registraron en 2022 en SGAE, un 15% fueron coreográficas.

    De esta manera, la coreógrafa y miembro de la Junta Directiva de la entidad, María Pagés, ha indicado que España "se vacía de danza". "En algunos lugares se ha dejado de programar la danza. La situación empieza a ser muy grave. Grave y triste también para un público al que se le impide poder disfrutarla porque no la programan en los teatros o en los festivales de su ciudad", lamenta.

   Con motivo del Día Internacional de la Danza, la entidad insiste a las instituciones públicas respecto a la situación de esta disciplina en España (producción y difusión) y quiere llamar la atención sobre la importancia de políticas estables que fomenten la internacionalización del talento español.

   "Estoy convencida de que en Extremadura, La Rioja o Galicia, por citar algunas comunidades, también les encanta disfrutar de la danza, vivirla y bailarlarla", ha destacado Pagés.

   Asimismo, ha añadido que programar "más danza es cuestión de voluntad, sensibilidad y responsabilidad política y social". "Los ayuntamientos, las comunidades autonómicas y el gobierno de la nación no puede hacer caso omiso a esta realidad, que pone en peligro el crecimiento cultural de nuestro país y puede sacar a muchos profesionales del mercado de trabajo artístico", ha concluido.