ALCALÁ DE HENARES (MADRID), 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El escritor Eduardo Mendoza ha llegado al Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares para participar en la ceremonia en la que se le hará entrega del Premio Cervantes 2016, y lo ha hecho reconociendo con humor que todavía no ha "reaccionado al galardón y, total, ya para lo que queda...".
"Ahora ya casi toca mirar hacia adelante y olvidarme de que ha pasado esto, pero la verdad que es una cosa bonita y buena. Sobre todo la voy a pasar con la familia, aunque ya se sabe que en estas cosas no respalda, siempre se burla, te dice que ha salido muy mal...en fin, para eso esta la familia, ¿no?", ha comentado entre risas a los periodistas antes de entrar al paraninfo.
Vestido con el tradicional chaqué para esta ceremonia, una vestimenta que no es habitual en el escritor, y a una hora temprana -en torno a las 10.30 horas, hora y media antes del comienzo del acto--Mendoza ha reconocido que su indumentaria para el acto tiene relación con su afición por "el disfraz". "El vestuario tiene un sentido y a mi me gusta disfrazarme. Tengo espíritu de teatrero", ha aseverado.
Preguntado por su discurso, ha adelantado que será "forzosamente quijotesco" y no será un alocución como tal, sino una "lección cervantina". "Es una lección sobre Cervantes, eso es lo que dicen los cánones, no un discurso de agradecimiento", ha concluido, tras resaltar que se siente "muy honrado por este premio.
Asimismo, respecto a si está preparando nueva novela -recientemente ha salido publicado un ensayo inédito-- no ha querido adelantar nada. "No hago 'spoilers'", ha concluido.