Retrata el París del exilio durante la Guerra Civil: "Picasso era un millonario que daba de comer pollos asados a sus perros"
MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El escritor Juan Manuel de Prada, quien regresa a la novela con 'Mil ojos esconde la noche. La ciudad sin luz' (Espasa), ha asegurado que la sociedad española está "madura" para hablar abiertamente de su pasado más reciente, pero entiende que son los políticos los que "no están preparados"
"Los políticos españoles están empeñados en crear unos arquetipos políticos, morales o históricos que no se corresponden con la realidad. Porque, cuando te metes en los archivos, descubres que la vida es un poquito más compleja", ha lamentado en una entrevista con Europa Press el escritor.
'Mil ojos esconde la noche' es una "apuesta muy especial" de De Prada, una suerte de continuación de su novela 'Las máscaras del héroe' de más de 800 páginas -a la espera de la publicación de la segunda parte, también de una cantidad de hojas similar-, que compone un fresco de los exiliados españoles durante y en los años posteriores a la Guerra Civil.
"En esta novela saco personajes franquistas, absolutamente franquistas, que tuvieron una actuación muy noble, como el cónsul español en París, Bernardo Rolland, quien salvó a muchos judíos. Por eso digo que la vida siempre es más compleja que las demarcaciones ideológicas que se pretenden desde los despachos políticos", ha criticado.
Es por ello que el escritor vasco lamenta que en el debate de la memoria histórica en España se hayan introducido "visiones unilaterales que no conducen a nada". "Si tú a la gente solo le das una versión y luego descubre otra, pues lo que al final se piensa es que todo es una gran mentira", ha alertado.
En la nueva novela de De Prada desfilan algunos de los nombres más reconocibles del siglo XX en el mundo artístico y periodístico en España, que por diversos motivos se encontraron en París. "Algunos de ellos podía ser chaqueteros, pero otros no, eran simplemente personas que pasaban por unas necesidades tremendas", ha explicado.
PICASSO Y SUS PERROS
Desde principios de la década del siglo XX la capital parisina se convirtió en la meca del arte, y en las páginas de 'Mil ojos esconde la noche' hay espacio para pintores como Picasso -siempre vistos desde el criterio de su protagonista, Fernando Navales-. Para De Prada, Picasso fue el ejemplo de "millonario" que alardeó de compromiso político, pero en realidad se benefició de las circunstancias.
"Picasso era un millonario que, en los años de hambruna más feroz, le daba de comer a sus perros pollos asados", ha recordado el autor, quien además califica al pintor malagueño como un protegido del régimen nazi. "Los nazis no tocan a Picasso durante los cuatro años de ocupación y hasta le dejan fundir bronce, que era una cosa radicalmente prohibida, porque se destinaba a armamento", ha añadido.
EL ARTISTA: LA PERSONA Y LA OBRA
Tras la caída de Cataluña en el año 39 a manos del ejército sublevado, hubo una "avalancha" de exiliados a París, cerca de medio millón de españoles que cruzaron la frontera. De entre los artistas, la mayoría vivía en el barrio de Montparnasse, en unas condiciones "bastante miserables".
Muchos de ellos tuvieron también cambios de ideología, en muchas ocasiones debido a la necesidad, y además algunos comportamientos reprobables. "¿Por qué se han ocultado algunas cosas? Pues porque son cosas que les hacen quedar mal ante los ojos de nuestra época, pero de lo que habría que darse cuenta es que nuestros grandes artistas muchas veces eran personas deplorables en muchos aspectos de su vida personal: los seres humanos somos así", ha concluido.