MADRID, 20 Abr. (EDIZIONES) -
El intercambio de rosas y libros es una de las tradiciones más significativas del Día del Libro, especialmente en Cataluña, pero...
¿POR QUÉ SE REGALAN ROSAS?
Este famoso intercambio es típico de Cataluña, donde el 23 de abril se celebra Sant Jordi, el patrón de la comunidad. La explicación de la tradición deriva de varias leyendas surgidas en diferentes siglos entorno a San Jorge.
De acuerdo a una de las versiones, en un reino --su localización exacta varía según las interpretaciones-- había un dragón que causaba grandes estragos entre la población y el ganado.
Con el fin de saciarlo, se elegía a una persona de manera aleatoria para ser sacrificada ante el dragón. En una ocasión le toco a la hija del rey y cuando iba a sucumbir ante la bestia, San Jorge se enfrentó a él y logró vencerlo con su espada. De la sangre salió un rosal rojo y San Jorge entregó la mejor flor a la princesa.
Dejando a un lado la leyenda, en la actualidad es habitual en Cataluña entregar una rosa y un libro a las personas cercanas.
¿POR QUÉ SE CELEBRA EL DÍA DEL LIBRO EL 23 DE ABRIL?
Se ha celebrado tradicionalmente en esta fecha porque coincide con la muerte de grandes escritores como Shakespeare y Cervantes. Popularmente se considera que ambos murieron el 23 de abril, pero técnicamente el escritor español murió el 22 y fue enterrado al día siguiente, mientras que el escritor inglés falleció el 23 de abril del calendario juliano, que equivale al 3 de mayo del calendario gregoriano.
Además este día coincide con el nacimiento o la muerte de otros escritores importantes como Josep Pla, William Wordsworth, Manuel Mejía Vallejo o Vladimir Nabokov.
¿DE DÓNDE SURGIÓ LA IDEA DE CELEBRARLO?
La propuesta de celebrarlo en España fue del escritor valenciano Vicente Clavel Andrés. Lo propuso a la Cámara Oficial del Libro en Barcelona en 1923 y fue aprobada tres años más tarde.
El 7 de octubre de 1926 se celebró el primer Día del Libro y cuatro años más tarde se trasladó de manera definitiva al 23 de abril, coincidiendo con el patrón de Cataluña.
No fue hasta 1995 cuando se convirtió en una fiesta internacional. Fue propuesto a la UNESCO por la Unidad Internacional de Lectores, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual.
Desde ese momento el 23 de abril se convirtió en el Día del Libro internacional. En la actualidad se celebra por millones de personas en más de cien países.