MADRID, 23 Sep. (EDIZIONES - David Gallardo) -
Bruce Frederick Joseph Springsteen Zerilli nació un 23 de septiembre de 1949 en Long Branch (Nueva Jersey, Estados Unidos), hijo de un conductor de autobús y de una secretaria. Predestinado, de alguna manera, para ser el héroe rockero de la clase trabajadora.
Este viernes cumple 67 años (y lo celebra lanzando un recopilatorio con temas inéditos, preludio de sus inminentes memorias). Y a pesar de que la cifra ya es considerable y supera la edad legal de jubilación, Bruce todavía es uno de los artistas más energéticos y vigorosos en directo, con conciertos que últimamente han superado las 4 horas.
Esto da idea del extenso cancionero que ha acumulado a lo largo de los años, a pesar de lo cual nos adentramos en la titánica tarea de escoger apenas una decena de temas de su repertorio. Si él no es capaz de hacer conciertos más cortos, nosotros seguro que patinamos al escoger sus composiciones esenciales. Pero allá vamos.
BLINDED BY THE LIGHT (1973)
El primer disco de Bruce Springsteen llegó hace 43 años, concretamente en febrero de 1973. No fue un éxito fulminante, ni mucho menos, pero ya mostraba el afán relator del joven músico en canciones como este 'Blinded by the light' que ejercía como tema de apertura. La primera canción del primer disco del rockero de New Jersey.
THUNDER ROAD (1975)
Después de 'Greetings from Asbury Park' (1972) y 'The Wild, The Innocent & The E Street Suffle' (1973), había llegado el momento de que el joven aspirante confirmara las expectativas o desapareciera para siempre. Parece mentira echando la vista atrás desde el presente, pero aquello era el todo o la nada.
Fue duro, la presión casi se le lleva por delante, pero en la adversidad apareció en el disco 'Born to Run (1975) el verborréico contador de historias capaz de plasmar los anhelos por una vida mejor de toda una generación. 'Thunder Road' es tal vez su pieza más celebrada y la que, efectivamente, le abrió las puertas del éxito masivo.
HUNGRY HEART (1980)
El impacto de 'Born to Run' tuvo continuidad en 1978 con el también celebrado aunque más oscuro 'Darkness on the edge of town'. Ya eran años de conciertos maratonianos con el descaro de la juventud airada con una E Street Band arollando cada noche como un tren de mercancías.
En su momento más excelso de creatividad llegó 'The River', que inicialmente iba a ser sencillo pero terminó siendo un disco doble para darle más sentido a la historia y por exceso de (buen) material. Con temas como el titular o este 'Hungry Heart' escrito inicialmente para los Ramones pero que terminó siendo el primer gran single de éxito de Springsteen.
BORN IN THE USA (1984)
Se tiende a dilatar la época dorada de Bruce desde 1975 hasta el disco 'Tunnel of Love' de 1987, durante unos años en los que sencillamente reinaba desde lo más alto sin parar de crear.
Desde la intensidad de 'Darkness on the Edge of Town' a la festividad de 'The River' (1980), pasando por el desesperado lamento solitario y acústico de 'Nebraska' (1982), hasta llegar a la explosión comercial de 'Born in the USA' (1984), con un tema homónimo que aún en la actualidad sigue demoliendo estadios por todo el mundo.
HUMAN TOUCH (1992)
Tratando de buscar un nuevo rumbo, Springsteen disolvió a la E Street Band a finales de los ochenta y enfrentó la década de los noventa con nuevo grupo y los irregulares álbumes 'Human Touch' y 'Lucky Town', ambos de 1992.
Aún sin su banda habitual, su creatividad seguía siendo incesante, aunque estos lanzamientos no sean precisamente los más amados por sus fieles. A pesar de ello, aquel primer lustro de los noventa tuvo recitales memorables y singles como 'Better Days' o este 'Human touch'.
THE GHOST OF TOM JOAD (1995)
Explorando de nuevo en su faceta como cantautor ya presentada en 'Nebraska', y rechazando la idea de reunir a la E Street Band, editó en 1995 el acústico 'The Ghost of Tom Joad' y giró por todo el planeta tocando en pequeñísimos recintos, para desesperación de los que no consiguieron entradas. Este tema está basado en 'Las Uvas de la Ira' de John Steinbeck.
THE RISING (2002)
Una vez superada la experiencia en solitario, El Jefe tanteó a sus viejos colegas de la E Street Band y regresó con ellos a la carretera en el 'Reunion Tour' de 1999. Esos conciertos les sirvieron para volver a confiar los unos en los otros y, ya juntos, grabar en 2002 el álbum 'The Rising', toda una arenga al pueblo estadounidense para superar los horrores del 11 de septiembre.
En 'The Rising', Springsteen se mete en la piel de un bombero que entra en las Torres Gemelas, liderando así el renacimiento de todo un país siempre tan necesitado de iconos en los que creer.
AMERICAN LAND (2006)
Tras la tercera mutación en sombrío cantautor acústico y solitario con 'Devils and Dust' (2005), Springsteen sorprendió convirtiéndose en un clásico artista de folk americano revisando el repertorio de Pete Seeger y algunos temas tradicionales, montando incluso una nueva banda llamada Seeger Sessions Band. 'American Land' es una canción propia que cobró relevancia en los recitales de esta época y en posteriores ya de nuevo con la E Street Band.
WRECKING BALL (2012)
Los fans lo ansiaban y Bruce terminó volviendo con la E Street Band y al rock de estadio encadenando los discos 'Magic' (2007), 'Working on a Dream' (2009), 'Wrecking Ball' (2012) y 'High Hopes' (2014). Sin descanso.
La canción que da título a su penúltimo disco es, de nuevo, una poderosa llamada a superar todas las adversidades porque, en definitiva, los tiempos duros vienen y van. Vienen y van mientras Springsteen se mantiene inalterable como si el tiempo no pasara por él, a pesar de haber perdido ya a algunos compañeros de batalla en el seno de la E Street Band.
AMERICAN SKIN (41 SHOTS) (2014)
Aunque el tema ya fue incluido en el directo Live in NYC de 2001, no tuvo versión definitiva en estudio hasta el álbum 'High hopes' de 2014, último hasta la fecha. La historia denuncia la muerte de Amadou Diallo a manos de la policía de Nueva York, por lo que su interpretación le trajo no pocos problemas con este colectivo con el que hasta entonces mantenía una idílica relación (ahora restaurada). Sirva su grandilocuente intensidad como epílogo a este repaso.