VÍDEO: Arctic Monkeys presentan su nuevo disco en The Tonight Show with Jimmy Fallon
MADRID, 11 May. (EDIZIONES - David Gallardo) -
Ya lo avisaron y lo han cumplido. El guitarrista Jamie Cook anticipó que no tuvieron en ningún momento la intención de hacer una continuación de su aclamado anterior álbum, AM (2013), y que, de hecho, consideraron la posibilidad de que el material que tenían entre manos viera la luz bajo el nombre de su líder Alex Turner y no de Arctic Monkeys.
"Al principio, porque era bastante básico, con piano, voz y sin guitarra. Alex estaba en plan '¿esto es Arctic Monkeys o estoy yendo a otro lugar con esto?'. Y quizás al principio yo estaba un poquito así también. Definitivamente no es un disco de guitarras pesadas, no es tipicamente lo que haríamos. Hubo que pensar mucho", declaró Cook a MOJO días atrás.
Por su parte, Turner explicó: "Me he engañado a mi mismo para escribir, sentándome ante el piano, haciedo esto que nunca había hecho antes. Esto me dio permiso para ir a un lugar al que antes tenía problemas para llegar. Me permitió mostrar cómo me siento más ampliamente que antes".
Pues bien, ahora que el álbum está entre nosotros desde hace unas pocas horas, podemos afirmar que no mintieron ni un poquito. Porque el sexto álbum de Arctic Monkeys, el primero en cinco años, es desconcertante con esa omnipresencia del piano que ocupa el lugar de las guitarras pesadas ya de antaño.
Con una primera escucha fugaz la sensación es de giro descomunal. Con ambientes espaciales dominados por los teclados, se vienen a la cabeza nombres como David Bowie, The Beach Boys, The Doors, Richard Hawley e incluso Jethro Tull. Una amalgama curiosa en un ambiente de piano bar crepuscular de esos de atmósfera infranqueablemente densa.
Todo ello con la verborrea de un Alex Turner más recitador que nunca. "Estoy hablando conmigo mismo, intermitentemente, a través de las once canciones", dijo días atrás el vocalista, quien efectivamente habla más que canta a lo largo de las once canciones de este álbum desconcertante a la par que magnético.
Un álbum de esos que igual crecen exponencialmente o que se hunden dramáticamente con sucesivas escuchas. Descubrir eso es el desafío tanto para grupo como para oyente. Pero no demos más rodeos y que cada cual escuche y se deje llevar. No si antes recordar que Arctic Monkeys presentarán este álbum en España en el Primavera Sound de Barcelona y el Mad Cool Festival de Madrid.