MADRID, 31 Oct. (EDIZIONES) -
Green Day reventó en la noche de este miércoles La Riviera madrileña ante algo más de 2.000 fans. Esto ya de por sí es reseñable, pues la banda de punk rock californiana está acostumbrada desde hace 25 años a tocar ante grandes multitudes, tal y como ocurrió en su última visita a la capital como cabeza de cartel del Mad Cool en 2017.
Para hacer la noche aún más especial, el trío tocó al completo su famoso álbum 'Dookie', con el que se hicieron mundialmente famosos en 1994. Canciones como 'Burnout', 'Longview', 'Welcome to paradise', 'Basket case' o 'When I come around' desataron el delirio en una sala apretada y sudorosa. Como en los viejos tiempos, como en los viejos noventa.
No faltó tampoco el último single del grupo, 'Father of all', adelanto del disco del mismo título que lanzarán en febrero. Y para redondear el repertorio, 'Bang bang', 'Revolution radio', 'Holiday', 'Boulevard of broken dreams' o 'Know your enemy' -con un tipo disfrazado de unicornio cantando el estribillo y acto seguido arrojándose contra el público-. Desenfreno total para el bis final con la furia de 'American idiot' y la canción favorita de Billie Joe, según acaba de confesar: 'Jesus of Suburbia'.
EL SÁBADO EN SEVILLA
Tras su paso por Madrid con este concierto 'sorpresa' anunciado la semana pasada, Green Day pone rumbo a Sevilla, donde este sábado 2 de noviembre actuará en la Plaza de España en un concierto organizado por MTV compartiendo cartel con The Struts y León Benavente, como preludio de los premios MTV EMAs que se entregan el domingo en la capital hispalense.
Dos conciertos diferentes, como el que la banda integrada por Billie Joe Armstrong, Mike Dirnt (Berkley, 1972) y Tré Cool (Fráncfort, 1972) dio el pasado septiembre en el celebérrimo Whiskey a Go-Go de West Hollywood para celebrar también por sorpresa el anuncio de su nuevo disco, 'Father of all motherfuckers', que llegará en febrero.
Aquella velada en L.A., ante apenas 300 de los suyos, festejaron también su regreso a la carretera para 2020 con una gira mundial que comenzará en marzo en Asia y en la que estarán acompañados en muchas fechas por Fall Out Boy, Weezer y The Interrupters. Eso ya será Green Day a lo grande, de nuevo en estadios y grandes festivales. Eso será, en definitiva, lo previsto por la maquinaria y, justo por eso, menos fantasía que lo acontecido a la orilla del Manzanares.