MADRID, 14 Jul. (EDIZIONES) -
Siete meses después de su fallecimiento, Carrie Fisher sigue muy presente para la industria del cine y la televisión, e incluso podría ser galardonada. La intérprete ha sido nominada póstumamente en los premios Emmy en la categoría de mejor actriz invitada en una comedia, gracias a su participación como Mia en Catástrofe, la serie de humor de Amazon.
El episodio por el que ha sido nominada fue el último trabajo de la actriz antes de morir. A finales del año pasado, Fisher sufrió un ataque al corazón mientras volaba a su casa en Los Angeles desde Londres, donde estaba grabando la comedia de Amazon. Días después, Fisher fallecía en un hospital.
En Catástrofe, Fisher interpretó a Mia, la madre de Rob, durante cinco episodios a lo largo de las tres temporadas. El actor que daba vida a Rob, Rob Delaney, publicó en Twitter "Madre..." junto a la noticia de la nominación.
La co-proagonista y co-creadora de la serie, Sharon Horgan, también le dedicó unas palabras: "Muy feliz y triste y orgullosa y dolida y encantada con la nominación de nuestra amiga Carrie Fisher".
Fisher ha sido nominada en esta categoría junto a Wanda Sykes por su papel en Black-ish, Angela Bassset de Master of None, Becky Ann Baker por la serie Girls, Kristen Wiig y Melissa McCarthy ambas por Saturday Night Live.
EL ÚLTIMO ADIÓS
Pero a Carie Fisher aún le queda una batalla más que librar en la gran pantalla, concretamente, el 15 de diciembre en Star Wars: Los último jedi. La octava entrega de la saga será la última que cuente con la presencia real de Leia Organa, la princesa Rebelde y líder de la Resistencia en la nueva trilogía.
Su muerte sorprendió mucho a los directivos de Lucasfilm, que tenían pensado darle casi todo el protagonismo en la novena entrega que dirige Chris Trevorrow. Quien pretende mantener "vivo" el espíritu del personaje más icónico de Fisher.