MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
El bailarín Carlos Acosta, quien regresará los próximos días 22, 23 y 24 de octubre al Teatro Real con su compañía Acosta Danza, ha afirmado que el pueblo cubano "necesita sanar", instanto a un "diálogo conciliador" entre la sociedad y las autoridades del país centroamericano.
"Todos estamos esperando por un diálogo conciliador y el pueblo cubano necesita sanar. Espero que podamos ponernos de acuerdo como país, hacia dónde vamos a ir, lo antes posible, porque hay muchas personas en medio que lo esperan y están sufriendo mucho", ha señalado el bailarín al ser preguntado por las protestas y detenciones en el país cubano el pasado mes de junio.
Fundada en La Habana en 2015 con el objetivo de mostrar al mundo el nuevo talento artístico de Cuba, a través de un programa que aúna danza clásica, contemporánea y ritmos cubanos, Acosta Danza cuenta con la colaboración del Gobierno cubano. "Este proyecto solo es realizable con apoyo financiero, hay muy pocos proyectos independientes allí", ha reconocido el bailarín, quien también tiene una relación estrecha con España.
"He sido regular en mis visitas desde que debuté aquí en el Teatro Albéniz: he estado con Tamara Rojo, también en el Real, en el Reina Sofía de Valencia, he hecho 'El lago de los cisnes'...", ha apuntado, para luego resaltar su colaboración con Icíar Bollaín en la película inspirada en su autobiografía.
"Tardé diez años en escribirla y luego se tardó otros diez años en rodar. Fue muy duro y traumático, escribí ese libro para sanar pero me encontré viviendo mi pasado. Aún así, he conocido a Paul Laverty y a Bollaín, que es una maestra en temas de films", ha señalado el bailarín.
Acosta, quien fue el primer bailarín en el Royal Ballet de Londres, se ha calificado como un "adicto al trabajo". "Me he preparado toda mi vida en la danza, siempre tratando de aprender y evolucionar. Me da todo mucho regocijo y ahora me considero responsable de la evolución de mis artistas", ha señalado.
De hecho, Acosta Danza es un proyecto para reunir a los mejores bailarines de Cuba, dándoles a conocer en escenarios internacionales. En Madrid, el espectáculo programado se dividirá en varias actuaciones, siempre "tratando de buscar las raíces cubanas y juntarlas con lo moderno: desde lo folclórico a lo conceptual".
'Evolution' abrirá la velada con la coreografía de Raúl Reinoso, Satori. En el budismo zen este vocablo se refiere a la iluminación espiritual; Carlos Acosta asumirá la interpretación de 'Mermaid', creación del belga Sidi Larbi Cherkaoui para la compañía, sobre música de Woojae Park y Erik Satie.
En ella, la danza contemporánea abraza a la clásica para contar la historia de una sirena, en la que el vestuario y la luz se apuntan como referencias fundamentales. Acosta volverá a bailar en la segunda parte del programa con la coreografía 'Two', de Russel Maliphant.
Con 'Paysage, soudain, la nuit', el coreógrafo sueco Pontus Lidberg se inspira en la música tradicional cubana a través de la rumba y su raíces africanas; y cierra la noche 'Twelve', del español Jorge Crecis, una pieza de danza-deporte.