MADRID 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Real Madrid, Pablo Laso, ha asegurado que no le "tranquiliza saber que nunca se ha remontado un 2-0" antes de viajar a Israel para el tercer encuentro de la ronda frente al Maccabi Electra, aunque ve a su equipo "preparado" para cerrar el pase a la 'Final Four' de la Euroliga pese a que su rival "ha demostrado que puede hacer mucho daño".
"En todos los deportes las estadísticas están para romperlas. No me tranquiliza saber que no se ha remontado un 2-0. Ahora mismo en lo único que me centro es en saber la situación de la eliminatoria, que obviamente nos beneficia. Pero todavía nos queda mucho trabajo", avisó Laso en la rueda de prensa previa al partido.
El técnico cree que "no es casualidad" el 2-0 inicial logrado por sus pupilos. "Como tampoco lo es que seamos primeros en la Liga, que hayamos terminado segundos en el Top 16" Creo que hay que pensar sólo en el partido. Plantearnos que quedan tres oportunidades no sería la manera de afrontarlo. Es claro que tenemos ventaja", abundó, aunque "lo único" que le "preocupa es el primer partido allí".
"Cuando antes consigamos el objetivo, mejor. Ahora mismo estamos 2-0, pero sigo pensando que queda mucho. Además pienso que los dos partidos han sido complicados aunque en el marcador hayamos tenido ventaja. El de allí será igual de complicado o incluso más", reiteró Laso.
Pese a que "cambiar en tan poco espacio de tiempo es difícil", el técnico sí considera que "se pueden cambiar cosas tácticas, que un jugador tenga más o menos protagonismo" en la eliminatoria, aunque tiene claro que la novedad más importante es el cambio de escenario tras dos choques en Madrid.
"El factor emocional de jugar en casa en un campo muy caliente seguro que está ahí. Nosotros también hemos tenido eso en el Palacio, donde hemos tenido un ambiente magnífico. Creo que nuestra afición ha sido clave y ha entendido el momento en el que estamos y ha ayudado a que vayamos con esta ventaja a Tel Aviv", agradeció un Laso que tiene "el objetivo claro".
"Estamos a una victoria de conseguir el pase a la 'Final Four' pero, como he dicho estos días, tan cerca y tan lejos. Vamos a una de las canchas más difíciles de Europa. Ganar en Tel Aviv es muy complicado. Ellos apelarán al orgullo y con orgullo solo no se gana, pero el Maccabi ha demostrado que nos puede hacer mucho daño. Ahora lo que intento transmitir a los chicos es que tenemos que ir día a día", desgranó.
Por último, el entrenador recordó que su equipo ha jugado esta temporada "alrededor de 60 partidos". En este sentido, reconoció que "se habla mucho de las temporadas de la NBA", pero no descarta que la competición en Europa pueda ser "más exigente".
"Al fin y al cabo, allí te estás jugando sólo un puesto de 'play-offs¡ y nosotros estamos todo el tiempo jugándonos cosas: desde el trofeo de la Comunidad hasta meterte en la Copa, meterte en el Top 16. Muchas veces el cansancio físico se une al mental. Y lo mejor que veo es que mi equipo está preparado. Estoy muy orgulloso de la competición que llevamos hasta ahora", zanjó.