VITORIA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Unicaja de Málaga, Joan Plaza, reconoció la superioridad del FC Barcelona Lassa en los cuartos de final de la Copa del Rey de Vitoria (82-70) y lamentó la falta de eficacia en los momentos decisivos del partido.
"La sensación es que hemos fallado un montón de contraataques en la primera parte, situaciones de tres contra uno que han acabado en pasos en tiros fallados. En ese momento podíamos haber roto el partido y no lo hemos hecho. Nuestra mala eficacia en el tiro interior ha permitido que ellos fueran abriendo brecha sin poder pararlo", analizó Plaza.
"También ha habido problemas en la selección del pick&roll en el tercer cuarto y eso unido a la eficacia de ellos en la segunda parte ha permitido que ganaran y lo hiciera merecidamente. Nos sacan un 25% de eficacia, tampoco hemos dominado el rebote. Ha ganado quien más lo ha merecido y quien lo ha hecho mejor", resumió el técnico de Unicaja.
Además, Plaza destacó que su puesta en escena fue "muy buena" porque les obligaron a tirar "con problemas, siempre punteados". "Pero la salida de Eriksson ha facilitado que nos quedáramos enganchados en los bloqueos. No es que los jugadores no lo hagan bien, sino que tú no se lo has comunicado bien en los entrenos. En esos primeros tres o cuatro minutos del tercer cuarto no hemos sido capaces de abrir brecha y ellos sí se han visto capaces de ganar", lamentó.
"Esto sucede por distintas situaciones. Dejan ha defendido como estaba atacando, algo que sucede muchas veces. Si un jugador no es capaz de abstraerse de que no está teniendo tiros cómodos, al final te hace defender mal", añadió en este sentido.
"Desde que acabé el partido del Real Madrid lo olvidé e intenté que lo olvidaran mis jugadores. No creo que nadie haya salido pensando en el partido del otro día. Pensamos en que cada partido es nuevo y que la historia se reescribe continuamente. Se han dado varias circunstancias que no hemos sido capaces de resolver sobre la marcha", dijo.
Por último, Plaza apuntó que "al nivel de profesionalidad", los jugadores "saben que una de las cosas que pueden pasar contra el Barcelona es perder". "Es la decepción de no poder corroborar que somos capaces de aguantar y ser maduros un partido entero. Ahora no hay tiempo para lamentos, sino para mirar adelante y hacerlo mejor", finalizó.