El Real Madrid de baloncesto gana confianza antes de un tramo clave

MADRID 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Real Madrid de baloncesto parece estar atravesando su momento más sólido de la temporada 2024-2025, justo cuando se avecinan semanas claves para su futuro en la Euroliga y con el primer gran título en juego, la Copa del Rey, gracias a una aparente mayor solidez y la confianza que dan las victorias.

El conjunto madridista firmó una espectacular pasada campaña donde sólo encajó 14 derrotas en 86 encuentros oficiales, pero en esta no se está acercando a esos números ni tampoco en su baloncesto. En menos de cuatro meses, ya ha perdido el mismo número en 36 partidos, pero las últimas semanas están siendo más positivas y ha conseguido, al menos, no comprometer antes de tiempo la temporada.

Pese al mal arranque, el equipo que entrena Chus Mateo está a tan sólo un triunfo del 'Top 4' en la Fase Regular de la Euroliga, mientras que en la Liga Endesa marcha tercero, a uno de los colíderes Valencia Basket y Unicaja, y las sensaciones han crecido a falta de un mes para el primer gran examen que será la Copa del Rey de Las Palmas de Gran Canaria (13-16 febrero).

El actual campeón español tocó seguramente fondo el pasado 12 de diciembre cuando cayó en su pabellón por 83-92 ante el Zalgiris Kaunas lituano, en lo que fue su cuarta derrota en sus últimos cinco partidos y seguramente el peor momento hasta entonces de la temporada, sobre todo a nivel continental donde estuvo fuera incluso del 'Top 10'.

Sin embargo, desde entonces, el Real Madrid ha parecido encontrar estabilidad, sobre todo a nivel defensivo y apoyado en una rotación aparentemente más adecuada, aunque el juego sigue pivotando sobre la 'vieja guardia'. El resultado, ocho triunfos, cinco seguidos, algo inédito en la campaña, y repartidos a partes iguales entre Euroliga y Liga Endesa en los últimos nueve partidos antes de un tramo de mucha exigencia a partir de este viernes con una importante visita al Zalgiris hasta la cita copera con un total de doce choques, seis de cada competición y con dos dobles jornadas europeas.

Atrás, Chus Mateo ha logrado mejorar las prestaciones de un equipo, principalmente en la máxima competición continental donde en los primeros 15 partidos, el conjunto madridista encajó una media de más de 83 puntos (83,2), mientras que en los cuatro últimos ha logrado reducirla a 75,5, lo que le ha permitido poder imponer mejor su baloncesto ofensivo, que sigue estando por encima de los 83 puntos de media en la Euroliga y casi 87 en la Liga Endesa.

Además, ha mejorado algo sus prestaciones lejos del ahora renombrado Movistar Arena y ha sacado victorias siempre importantes en lo anímico como el Clásico de Euroliga y el de Liga Endesa, o la del pasado lunes en el Fernando Buesa Arena ante el Baskonia (82-88). Sólo el Valencia Basket, a gran nivel este año, le ha podido derrotar en este buen tramo, por un apretado 85-84 en un choque que se le volvió a escapar al final al once veces campeón de Europa.

Estas situaciones de máxima tensión y concentración también agravaron el mal momento inicial. El Real Madrid dejó escapar partidos en teoría más asequibles en la máxima competición continental por canastas decisivas ante el Maccabi y el ASVEL, o ante el Leyma Coruña en Liga Endesa, o por no tener acierto en el minuto final como ante el Baskonia (Euroliga) o el Surne Bilbao Basket (Liga Endesa).

Otro factor que le afectaron fueron los tremendos altibajos que sufría durante los partidos, principalmente en el último cuarto, y que igualmente le costaron sus opciones de haber mejorado su balance. Ante el Bayern, en su estreno en Euroliga, cayó por 97-89 (33-16 en el cuarto final), ante el Baskonia por 76-72 (28-20), ante el Olympiacos por 79-69 (23-10), ante el Maccabi por 79-78 (24-14) o ante el ASVEL por 80-78 (21-12), mientras que en las derrotas ante el Efes (64-74) y ante el Zalgiris (83-92) se fue al descanso 25-47 y 38-54 abajo, respectivamente.

Ahora, en esta buena racha de resultados, aunque sólo ha ganado 19 de los 36 cuartos, perdiendo tres de los cuatro parciales en su derrota en La Fuente de San Luis, algo que compensó ganando el tercero de forma clara (16-29). De hecho, ante Valencia Basket sufrió sus peores diez minutos en esta racha, con el 17-9 del primer periodo, mientras que el AS Monaco le endosó un 17-25 en los últimos diez de su duelo en Madrid, aunque entonces el Real Madrid los afrontaba con el choque solucionado (77-47). Sin embargo, ha ganado nueve cuartos por encima de los diez puntos y eso le ha ayudado a ganar partidos como el de este miércoles en Granada donde remontó en los diez minutos finales con un 15-28.

MEJORA A NIVEL INDIVIDUAL

A nivel individual, no ha habido excesivos cambios en el impacto de minutos, con el peso todavía recayendo en los más veteranos, aunque Chus Mateo ha tratado de tener rotaciones más equilibradas para que se noten menos los cambios efectuados en la pista. Las lesiones, pese a la última de Gaby Deck, también han respetado más tras un primer tramo complicado de cara al acoplamiento.

Sólo el pívot Walter Tavares, este año sin un relevo tan claro como el pasado con Vincent Poirier, ha formado parte del quinteto titular en los nueve partidos de este positivo momento, aunque el que más minutos sigue acumulando es el base Facundo Campazzo, el más regular en sus actuaciones y que está siendo el líder prácticamente desde comienzo de campaña, aunque no se ha librado de malos partidos.

Sí ha habido más evolución en otros jugadores como Mario Hezonja y, sobre todo, Dzanan Musa. El croata (16,1 puntos y 6,1 rebotes en esta racha) se está acercando al nivel de la temporada pasada, con un paso adelante en defensa, mientras que el bosnio está recuperando su acierto ofensivo, como se comprobó en la última visita al Buesa Arena, con 29 puntos y 5/5 en triples, y su capacidad de atacar el aro que tanto beneficia a su equipo.

Otro jugador que está aportando en la cancha es Alberto Abalde, también de cara a la mejora defensiva, lo que le ha convertido también en alternativa en los quintetos iniciales de Chus Mateo, mientras que la asignatura pendiente es lograr un mayor protagonismo de todos los nuevos fichajes (Usman Garuba, Andrés Feliz, Serge Ibaka y Xavier Rathan-Mayes), cuyo papel en la mejora defensiva también es clave.