Triunfo merengue por 98-86 ante una Virtus Bolonia sin combustible
MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Real Madrid ha ganado este martes por 98-86 a la Virtus Segafredo Bolonia con papel destacado del alero croata Mario Hezonja, en una cita correspondiente a la jornada 9 de la liga regular y en la que los merengues han recuperado el buen tono en la Euroliga al calor de su público.
Tardó en verse espectáculo sobre la cancha del WiZink Center, pues en fallo técnico en la mesa de cronometraje interrumpió el duelo nada más comenzar. Superado el percance, los locales se encomendaron primero al juego interior con Walter 'Edy' Tavares, pero pronto fue Mario Hezonja quien con lanzamientos de media y larga distancia cogió las riendas.
Por parte visitante, Isaïa Cordinier anotó los seis primeros puntos y Will Clyburn apuntaló el tiro desde el perímetro para empatar (21-21) a minuto y medio de agotar el primer periodo. Un triple lejano de Hezonja sobre la bocina y una doble intimidación en defensa de Serge Ibaka hicieron que el Real Madrid acabase por delante (28-25) después del 10'.
No obstante, los pupilos de Luca Banchi iniciaron el segundo acto con un parcial de 0-9 en dos minutos, culminado con una penetración y tiro de Clyburn apoyado en tablero, que provocó tiempo muerto de Chus Mateo. Y funcionó para Ibaka en la 'pintura' y para Xavier Rathan-Mayes desde más allá del arco, volteando el marcador (41-39) a 3:57 del descanso.
Sin dueño estaba el partido, con Banchi recurriendo a tiempo muerto con premura tras ver a Sergio Llull clavando un triple sin marcaje. Pero surtió poco efecto porque la Virtus falló un par de ataques claros y su rival lo aprovechó a la contra gracias a Gaby Deck al galope, a Tavares machacando el aro y a Llull con otra aplaudida canasta de tres puntos.
Tres tiros libres de Cordinier acercaron al equipo italiano para irse con 53-49 al intermedio, del que regresó Tornike Shengelia como el más entonado hasta que el Real Madrid respondió por obra de Alberto Abalde y de la conexión entre Hezonja y su habitual socio ofensivo, un Facundo Campazzo todavía sin el brillo de otras noches europeas.
Para relajación del base argentino, su defensor Cordinier se cargó de faltas en la reanudación. Sin esa presión, junto a la escasa puntería de Clyburn y de Alessandro Pajola, el conjunto madridista se marchó por 73-60 cuando aún quedaban 4:04 para zanjar un tercer cuarto lleno de errores en una Virtus a trompicones.
Resurgió Clyburn con un triple frontal y una canasta a la media vuelta, pero de forma efímera, ya que Campazzo se envalentonó entre el final de ese tercer periodo (80-67) y el arranque del cuarto, donde sus compañeros se contagiaron de la efectividad. Además, saltaron de nuevo al parqué Rathan-Mayes y Llull con Ibaka para evitar cualquier susto.
Poco a poco se había quedado sin combustible la Virtus, guiada a la desesperada en el tramo final del encuentro por el veterano Marco Belinelli. Otro hombre experimentado como Achille Polonara también puso empeño, más que destreza, si bien el plantel dirigido por Banchi se moría lentamente en el poste bajo frente al ímpetu de Ibaka.
Con todo encaminado hacia la victoria blanca, Chus Mateo sustituyó a Llull para que el jugador de Mahón recibiera los aplausos de la grada al haber alcanzado la cifra de 1.100 partidos oficiales con el Real Madrid. El resultado final puso a los madrileños con un balance 4-5, a rebufo de los puestos del 'play-in', y dejó al cuadro boloñés con 2-7 muy abajo.
FICHA TÉCNICA.
--RESULTADO: REAL MADRID, 98 - VIRTUS SEGAFREDO BOLONIA, 86 (53-49, al descanso)
--EQUIPOS.
REAL MADRID: Campazzo (14), Abalde (8), Hezonja (20), Ndiaye (2) y Tavares (14) --quinteto inicial--; Rathan-Mayes (17), Deck (6), Ibaka (11), González (-), Gueye (-) y Llull (6).
VIRTUS SEGAFREDO BOLONIA: Cordinier (18), Pajola (-), Clyburn (15), Shengelia (20) y Zizic (8) --quinteto inicial--; Hackett (-), Polonara (-), Tucker (2), Belinelli (10), Morgan (3) y Diouf (10).
--PARCIALES: 28-25, 25-24, 27-18 y 18-19.
--ÁRBITROS: Pastusiak, Kardum y Majkic. Sin eliminados.
--PABELLÓN: WiZink Center, 7.549 espectadores.