Savané: "No llegamos en el mejor momento y tienen la inmensa ventaja de jugar en casa"

MADRID 19 Feb. (EUROPA PRESS) -

El pívot senegalés del FIATC Joventut, Sitapha Savané, ha asegurado que "será difícil gestionar las emociones" ante su exequipo, Herbalife Gran Canaria, que tiene "la inmensa ventaja de jugar en casa" en esta Copa del Rey, a la que los verdinegros no llegan "en el mejor momento" tras caer de forma contundente ante el FC Barcelona en la Liga Endesa.

"Costaba pensar que fuésemos cabezas de serie y que tuviésemos tan mala suerte de jugar contra Gran Canaria. Claramente son los favoritos, porque tienen la inmensa ventaja de jugar en casa una Copa que se lleva esperando mucho tiempo, y tendrán a la afición volcada", valoró Savané sobre el encuentro de cuartos de final.

Además, el africano añadió que el conjunto verdinegro no llega en su "mejor momento", y que tratará de establecer "un punto de inflexión positivo" a partir de este choque, que considera como "uno de los más igualados" del torneo y en el que "los dos equipos se ven casi con las mismas oportunidades de pasar".

"Todo el mundo saldrá a tope y espero que salga un buen partido para todos y que gane el mejor. Evidentemente no voy a estar tan contento si gana Gran Canaria. Es una situación única, y será un trabajo grande gestionar las emociones y estar centrado cuando empiece el partido", analizó como exjugador del conjunto canario.

Después de haber militado en las filas del Herbalife Gran Canaria durante ocho temporadas, Savané huyó de los focos al decir que es solo "uno de los grandes protagonistas" de esta Copa del Rey, y agradeció los elogios que le llueven a su regreso a la isla, en el que espera estar "más preparado que la primera vez, que fue un desastre".

"Espero que para 'Eddy' (Tavares) no sea siempre tan especial. Siempre se motiva. Es un honor que todos los chavales te digan este tipo de cosas, porque significa que algo has hecho bien en tu carrera", comentó Savané sobre el pívot del conjunto canario, uno de los jugadores que se miraron en su espejo.

Sobre su mejoría a sus 36 años, el pívot señaló que es "cada vez más listo", y que evita meterse en "ciertos berenjenales" en la pista. También explicó sobre su capacidad taponadora que "a lo largo de los años" ha conservado cierta "habilidad", y que es necesario tener "colocación, 'timing' y capacidad física por altura o por salto".

"Todo el mundo se mentaliza para ganar el primer partido y después llegar lo más lejos posible. Hemos intentado estos días dar todos los consejos adecuados. Una vez llega el momento es una batalla, cuando uno sale ahí es un gladiador y no hay veteranos o jóvenes, hay que dar lo mejor", sentenció en relación a la posible falta de experiencia en la 'Penya'.