MADRID 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El seleccionador nacional de balonmano masculino, Jordi Ribera, reconoció el gran debut (32-15) de los 'Hispanos' ante República Checa en el Campeonato de Europa de Croacia 2018, aunque quiso "tener los pies en el suelo" ante el exigente Grupo D y, después, la dura segunda fase para aspirar a las semifinales.
"Ha sido positivo todas las combinaciones que se han ido haciendo, es algo que hemos ido probando este año y medio, que haya muchas rotaciones y que esas rotaciones no nos obliguen a hacer muchos cambios defensa - ataque", indicó en declaraciones facilitadas por la Real Federación Española de Balonmano (RFEB).
España tuvo un sólido estreno, antes de medirse a Hungría el lunes, con Dinamarca el miércoles. "En el segundo tiempo, a base de recuperar balones y la efectividad en la portería nos ha permitido hacer goles y poder correr al contraataque sin desmerecer que en la primera parte hemos trabajado muy bien los ataques posicionales hasta encontrar una buena finalización", apuntó.
"Pensaba que iba a ser un partido más completo pero pienso que hay que tener los pies en el suelo, que es solo un paso y nos vienen dos partidos complicados contra Hungría y Dinamarca", añadió, antes de referirse a los húngaros. "Hemos estado viendo los dos partidos amistosos que jugaron con Suecia, es un equipo con dos centrales muy creativos y con una defensa muy rocosa, con un 6:0 muy cerrado", comentó.
"Va a ser un equipo que nos va a trabajar bien en defensa, vamos a tener que mover bien el balón y como siempre intentar defender. Es un equipo que combina el lanzamiento exterior con esas situaciones de dos centrales que mueven muy bien el balón y está claro que va a ser un partido totalmente diferente", finalizó.