La marcha de ciclismo de época se celebró este sábado y domingo en Villanueva del Pardillo y Madrid
MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los exciclistas Miguel Induráin, pentacampéon del Tour de Francia, y José Manuel Moreno, campeón olímpico en pista en Barcelona'92, han sido homenajeados en la sexta edición de la marcha de ciclismo de época Clásica Otero, celebrada en Villanueva del Pardillo y Madrid este sábado y domingo coincidiendo con el final de La Vuelta a España.
Bajo el eslogan 'Homenaje al olimpismo clásico', la Clásica Otero de 2024 devolvió a las carreteras madrileñas las bicicletas y maillots de los años noventa para rendir tributo a los deportistas olímpicos españoles en el año en que París se ha convertido en la capital de los Juegos.
Dicho homenaje a Induráin, ganador de los Tours de Francia desde 1991 a 1995, dos Giros y campeón olímpico y del mundo contrarreloj, y José Manuel Moreno, quien ganó el oro olímpico con una bicicleta Otero en la Ciudad Condaol, se llevó a cabo, primero, en una etapa con salida y meta en Villanueva del Pardillo de algo más de 80 kilómetros.
En la misma, en la que también participó el exciclista del Reynolds Ángel Arroyo, segundo en el Tour de Francia de 1983, se ascendió al puerto de la Cruz Verde y el avituallamiento estuvo ubicado en Brunete, localidad natal de José Ramón de la Morena y en la que el periodista y su alcaldesa, Mar Nicolás, se acercaron para saludar al pelotón clásico.
En la salida también estuvo el excorredor Anselmo Fuerte, tercero en las Vueltas a España de 1988 y 1990, quien bromeó con que ya prefiere seguir las carreras, pero sin volver a subirse a la bici.
El alcalde de Villanueva del Pardillo, Eduardo Fernández, y su concejal de Deportes, Francisco Funes, destacaron la vinculación de la localidad con la bici, pues, entre otras actividades, la feria Festibike se celebrará en el municipio hasta 2027 y acogerá la marcha de la Mussara el próximo 29 de septiembre.
El domingo el pelotón de la Clásica y sus jerseys de lana, cascos de chichoneras y tubulares cruzados sobre el torso se trasladó a la Puerta del Sol de Madrid para iniciar un recorrido de 25 kilómetros que coincidió, en algún tramo, con la última etapa de La Vuelta a España, la contrarreloj de 22 kilómetros entre Distrito Teléfonica y la sede de la compañía telefónica en la Gran Vía de Madrid.
En el corte de cinta de la salida estuvieron junto a Sol Otero, responsable de la organización de la Clásica Otero, el subdirector general de Estudios y Formación Deportiva de la Comunidad de Madrid, Ricardo Echeita; el alcalde de Villanueva del Pardillo, Eduardo Fernández; y la ex ciclista Dori Ruano, embajadora de La Vuelta femenina.
"Ha sido emocionante volver a reencontrarse con amigos de siempre y poder homenajear a dos grandes campeones como José Manuel Moreno y Miguel Induráin en esta fiesta de la bicicleta de época. Aquí tienen cabida las viejas Otero que siguen vigentes por el 'alma' que puso mi padre en ellas, pero también otras marcas que forman parte de la historia del ciclismo. Agradezco el apoyo de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento de Villanueva del Pardillo, así como del resto de colaboradores que han hecho posible este sueño", comentó Sol Otero.