MADRID 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ciclista esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) reconoció que ahora ya tiene "una ventaja importante" en la general para empezar a ver cerca el triunfo en un Tour de Francia al que llegó "encendido" tras dos años sin ganarlo, con otra exhibición este viernes en la decimonovena etapa, dura pero conocida.
"Estoy muy contento de haber tenido buenas piernas hoy. Entrenamos aquí durante todo el mes de junio, entre el Giro y el Tour. Fue una concentración muy dura, sin jornadas sencillas ya que teníamos que subir todos los días", apuntó después de cruzar la meta de la etapa reina, disputada entre Embrun e Isola 2000.
"Mis compañeros y yo ya habíamos hablado de las ganas que teníamos de correr esta etapa, y la hemos hecho como habíamos dicho, marcando un buen ritmo hasta el momento en que he atacado", añadió.
El líder del Tour terminó con una fuga de prestigio con un ascenso prodigioso. "Ha sido perfecto. Me quedé un poco vacío en los dos kilómetros finales de la etapa. Cuando alcancé a Carapaz y Simon Yates, ya sentía que estaba al límite. Entonces vi a Matteo Jorgenson y apreté para adelantarle con un sprint. Eso me dejó las piernas muertas, y la verdad es que tenía miedo de que pudiera alcanzarme y ganarme al sprint", afirmó.
Pogacar, campeón en 2021, metió ya cinco minutos al segundo, un Jonas Vingegaard que vio alejarse la opción de un tercer Tour seguido. "Ahora tengo una buena ventaja. Supongo que estos dos últimos años seguidos sin vencer han encendido cierto fuego dentro de mí, y quiero aprovechar al máximo este Tour de Francia", dijo.
"Ahora esperamos disfrutar de la etapa de mañana dejando marchar a la escapada, ya que correremos por las carreteras en las que he entrenado durante la mayor parte de mi carrera. Espero que no pase nada importante", terminó.