MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Pirelli, proveedor de neumáticos del Mundial de Fórmula 1, confirmó que los neumáticos que calzaban los monoplazas de Max Verstappen (Red Bull) y Lance Stroll (Aston Martin) en el momento de sus respectivos reventones en el Gran Premio de Azerbaiyán no tenían ningún defecto, y que la causa se podría deber a que no se siguieron "los parámetros de salida prescritos" en cuanto a presión y temperatura máxima de sus mantas.
La marca italiana emitió un comunicado en el que informó que había completado "junto a la FIA" el análisis de los neumáticos traseros izquierdos que montaban los monoplazas del neerlandés y del canadiense en el momento de su accidente, el cual se había "ampliado a otros coches participantes en la carrera, cuyas cubiertas acumulaban un número idéntico o superior de vueltas a las de los accidentados".
"La indagación confirma la ausencia de defectos de producción o calidad de los neumáticos; tampoco se han detectado síntomas de fatiga o delaminación. La causa de los dos pinchazos en el Aston Martin y el Red Bull se debe a una rotura circunferencial en el flanco interior, lo que podría relacionarse con las condiciones de rodadura de ambas gomas, que podrían no haber seguido los parámetros de salida prescritos (presión mínima y temperatura máxima en las mantas)", subrayó.
La fábrica señaló que ha "compartido" las conclusiones de este informe con los equipos y con la FIA, y que ha acordado con la federación "nuevos protocolos de comprobación, que incluyen una directiva técnica actualizada -ya compartida con los equipos- para monitorizar las
condiciones operativas durante los fines de semana de carrera". "También se valorarán, si se cree necesario, nuevas medidas", sentenció.
"Hemos trabajado en estrecha colaboración con Pirelli y la FIA durante su investigación sobre el fallo de los neumáticos de Max en la vuelta 47 del GP de Azerbaiyán y se puede confirmar que no se encontró ningún fallo en el coche. Nos adherimos a los parámetros de neumáticos de Pirelli en todo momento y seguiremos su orientación. Estamos agradecidos de que después de los impactos a alta velocidad del fin de semana ningún piloto resultó herido", remarcó Red Bull.