MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) manifestó este miércoles su "máxima preocupación" por la presencia como vocal en el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de Jaime Caravaca, sobrino del administrador y único accionista de la empresa "que pagó el presunto espionaje sobre David Aganzo, presidente de AFE y de FIFPRO".
"La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) quiere manifestar su máxima preocupación por la presencia, en condición de vocal, de Jaime Caravaca Fontán como integrante del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD)", indicó el comunicado emitido por la entidad este miércoles.
AFE explica que Jaime Caravaca es sobrino de Ramón Caravaca, administrador y único accionista de la inmobiliaria Egmont 2008 SL, la empresa que, según El Confidencial, "pagó el presunto espionaje al que fue sometido David Aganzo, presidente de AFE y de FIFPRO (Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales)".
"Es conveniente recordar que el presunto espionaje a David Aganzo ya fue denunciado y su investigación, entre otras más, forma parte de las diligencias abiertas por el Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda. Hecho que también se denunció al Consejo Superior de Deportes en repetidas ocasiones, sin que éste tomase ninguna decisión al respecto ni lo trasladase al TAD", indicó AFE en su nota.
Desde el sindicato de futbolistas destacaron, además, que Ramón Caravaca es socio del bufete GC Legal, cuyo socio director y fundador es Tomás González Cueto, asesor jurídico externo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), además de ser el abogado penalista que representa a Luis Rubiales en algunos procedimientos.
Por otra parte, AFE recordó la información que afirmaba que Ramón Caravaca confesó ante el Colegio de Abogados de Madrid que "los seguimientos y vigilancias al presidente de AFE contaron con la autorización de Rubiales". La entidad aclaró que "quien efectuó el encargo -a Caravaca- fue un cliente que le fue presentado por don Juan Rubiales", no por Luis Rubiales.
Finalmente, AFE concluyó que Jaime Caravaca, "al tener claras y evidentes conexiones con la RFEF y su presidente suspendido temporalmente por FIFA", debe inhibirse en el procedimiento abierto en el TAD que valorará la inhabilitación de Rubiales al frente de la Federación "por su muy grave comportamiento en el transcurso y tras la final de la Copa Mundial femenina".