MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, reconoció que no le gustó que bajasen "el ritmo" en la segunda parte de su duelo de este miércoles ante la UD Las Palmas, aunque lo disculpó en parte porque todos los equipo están "en un momento en el que tienen bajada de intensidad" y a los futbolistas les cuesta "tener un rendimiento al cien por cien".
"Lo que me preocupa es el final de la segunda parte cuando hemos bajado el ritmo y hemos defendido demasiado bajo y con poca intensidad, creo que estamos en un momento de la temporada donde los equipos tienen una bajada de intensidad porque el desgaste es bastante grande", expresó Ancelotti en rueda de prensa.
El técnico madridista indicó que intentaron "empezar fuerte" el partido y "evitar problemas como en otros partidos". "Lo que ha faltado ha sido un poco de acierto", añadió, aunque elogió el partido de Brahim Díaz y Joselu, que aportaron "algo bueno, sobre todo en la primera parte" y que crearon "peligro por la calidad que tienen".
En este sentido, se centró en el malagueño y su buen partido, con gol incluido. "Cuando uno que juega poco, sale y lo hace bien, todos estamos contentos porque significa que trabaja bien y que está motivado aunque no juegue mucho", remarcó. "Puede jugar como mediapunta aunque el trabajo defensivo no está en sus características y como segundo delantero se mueve muy bien, sobre todo con el balón en los pies porque tiene mucha calidad y tiene habilidad en espacios reducidos ante equipos que se cierran mucho. Creo que nos va a ayudar mucho en la temporada", añadió.
En cambio, Rodrygo sigue sin ver puerta, aunque para Ancelotti "son momentos que pasan para los delanteros". "Cuando no marcas te viene un poco de ansiedad y nosotros tenemos que seguir dándole confianza. No ha marcado, pero dio una asistencia fantástica a Joselu, para mí ha aportado lo suficiente. Para él, el gol es muy importante y llegará cuando no piense en marcarlos sino en trabajar como está trabajando porque el gol llegará por la calidad que tiene", subrayó.
Sobre la falta de minutos de Jude Bellingham y Luka Modric, el entrenador del Real Madrid admitió que estaban "cansados" y que ha querido evitar "problemas", volviendo a su mensaje anterior para referirse al croata. "Los jugadores entienden muy bien que en estos partidos la rotación es muy importante. He intentado manejar la plantilla y hasta el próximo parón esto va a pasar porque el desgaste es importante, hay muchas lesiones en este periodo y a los jugadores les cuesta tener un rendimiento al cien por cien. Si puedes darles descanso les viene bien", advirtió.
"CREO QUE GIL MARÍN SE HA EQUIVOCADO A LO GRANDE"
"Vinícius ha entrado con muchas ganas, quería marcar y aportar, pero después de un mes algo le falta. Está totalmente recuperado y ahora debe prepararse bien para el sábado donde será titular", puntualizó sobre el brasileño que volvió tras su lesión el pasado 25 de agosto en Balaídos.
La vuelta del extremo coincidió con la lesión de David Alaba, que deja a Rüdiger y Nacho como únicos centrales sanos para la visita al Girona. "Hemos recuperado a Mendy y Carvajal estará para el próximo. Rüdiger está un poco 'tocado', pero pensamos que es un golpe y él piensa que estará bien. Alaba ha tenido un problema en el abductor y creo que no va a estar, vamos a ver estos días lo que se puede hacer para el sábado", explicó.
Ancelotti también habló sobre el juego más directo que usó su equipo y que vio "como mejor opción" porque la UD Las Palmas defendía con "la línea defensiva bastante alta". "No soy un superfan de la posesión, soy superfan de los goles", remarcó.
Finalmente, fue preguntado por las palabras del consejero delegado del Atlético de Madrid, Miguel Ángel Gil Marín, recogidas por el diario 'Marca', donde criticaba el "clima insoportable" que generaba el Real Madrid para los árbitros, considerando que "adultera la competición". "No hago caso esto, cada uno dice lo que quiere", trató de zanjar. "Para mí se ha equivocado a lo grande, ninguno es perfecto", sentenció tras volver a ser cuestionado.