MADRID 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El técnico del Celta de Vigo, Eduardo Berizzo, felicitó a su equipo por un histórico pase a semifinales de la Europa League, después de empatar (1-1) a domicilio este jueves ante el Genk, un duelo que pudieron "vivir más tranquilos" de no ser por el tanto local, que no impidió al Celta seguir soñando.
"El logro en el cómputo final es muy meritorio los eliminamos con justicia y para nosotros ahora se abre un nuevo sueño, una nueva ilusión de seguir avanzando", indicó en declaraciones a beIn Sports tras el duelo de vuelta de cuartos de final, que dio al Celta su primera presencia continental en semifinales.
"Estoy feliz por los jugadores, por el equipo, por el logro. Esto es mérito de ellos y ojalá estas palabras no distraigan su atención. Era un partido entendido como una final para nosotros, con un plan de partido protagonista, pensamos en el arco enfrente", añadió.
El técnico argentino confesó que dominaron el partido y no llegaron a sufrir pese a que los belgas empataron pronto el tanto de Pione Sisto. "El partido se nos tuerce con un fallo de salida, pero el equipo volvió a dar muestras de jugar como se debe, como todos esperamos, haciéndonos sentir orgullosos", afirmó.
"Ellos empezaron a jugar directos, ingresó un defensa a jugar de nueve. Fue un partido para vivirlo más tranquilo pero el gol, mete al Genk en el partido y lo hace ilusionarse. El aplomo y experiencia del equipo se ve en los minutos finales donde no corrimos riesgos y ganamos un partido, una eliminatoria justamente", añadió.
Berizzo explicó que el Celta ha crecido al ritmo de la competición. "Cada partido que pasa nos hacemos más fuertes o descubrimos nosotros mismos de lo que somos capaces y eso como entrenador siempre me descubre una nueva posibilidad. Me han hecho creer o hemos creído juntos que podemos vencer a cualquiera", afirmó.
"Nos toque quien nos toque son a estas alturas rivales dificilísimos. Seremos un rival incómodo y peligroso para cualquiera", terminó, felicitando a los aficionados celtiñas, tanto desplazados a Bélgica como los que se quedaron en Vigo.