Emiratos Árabes, Kuwait y Omán podrían recibir partidos Mundial 2022

ABU DABI, 26 Feb. (Reuters/EP) -

Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Omán podrían organizar algunos partidos del Mundial de fútbol en 2022 para que se pueda celebrar un torneo ampliado si Abu Dabi resuelve una disputa diplomática con Catar, anfitrión del evento, afirmó este martes la máxima autoridad deportiva emiratí.

Se espera que la FIFA decida el próximo mes si ampliará el Mundial de Catar de 32 a 48 selecciones, pero ya advirtió que será difícil para el estado del Golfo Pérsico hacer solo el evento. Sin embargo, una profunda crisis a nivel político entre algunos países del Golfo Pérsico complica las perspectivas de compartir la competición.

En junio de 2017, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Baréin y Egipto, una nación que no está ubicada en el Golfo, cortaron los lazos políticos, comerciales y de transporte con Catar, al que acusan de apoyar el terrorismo.

"Si esto se resuelve, estaremos más que felices de ayudarlos a organizar la Copa del Mundo. Pero sé que si la crisis persiste, no podremos", dijo el presidente de la Autoridad General de Deportes de EAU, Mohammed Khalfan al-Romaithi, en una entrevista en Abu Dabi.

El mandatario dijo que Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Omán tendrían estadios e infraestructura que cumplirían con los requisitos de la FIFA para albergar los partidos de un Mundial. También aseguró que algunos partidos podrían celebrarse en estadios más pequeños si la FIFA lo permite.

El mes pasado, Romaithi dijo a Reuters que Emiratos Árabes Unidos acogería con satisfacción ser anfitrión del Mundial 2022 si se resuelve su ruptura diplomática con Catar. Aseguró también que su país es capaz de albergar partidos de dos grupos.

Catar ha dicho que no tomará una decisión sobre la expansión del torneo hasta que conozca los detalles de un estudio de factibilidad de la FIFA. Este año, Emiratos Árabes Unidos fue anfitrión de la Copa Asiática, que ganó Catar tras golear 4-0 en semifinales a la nación anfitriona. Ese partido se vio empañado por problemas en las tribunas, desde donde aficionados de EAU lanzaron zapatos y botellas a los jugadores de Catar.