MADRID 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
El nuevo entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, reconoció que se encontraba en un momento profesional en el que buscaba "cerrar una etapa" tras cuatro años seguidos en el Athletic Club, aunque explicó que la llamada del cuadro culé tiene que llegar en el "momento justo", al tiempo que explicó la "importancia" que le da al "grupo".
"Soy muy tranquilo, o lo aparento pero no lo soy tanto. Le doy mucha importancia al grupo, porque al final aquí estamos expuestos a muchas cosas. Hay que afrontar todo como grupo. Somos una gente con grandes privilegios y también a la que se le exige mucho. Tenemos que estar preparados, es gente joven y cuesta, y el estar juntos ayuda", indicó.
La primera entrevista del extremeño a Barça TV, tras el avance del viernes, vio la con el flamante técnico culé desvelando inquietudes, esquemas de juego e influencias en su pasado. "Desde que llegué todo ha sido muy intenso. Todo ha venido muy rápido en las últimas horas. Aunque ya lo sabía, te das cuenta realmente cuando estás metido en la vorágine de las ruedas de prensa, de la presentación..., de la dimensión de este club", indicó.
"Deseo que empiece el primer día para ponerme el chándal y empezar a entrenar. Sé que es un paso importante, conozco la trascendencia que tiene, porque con cada paso que hago me doy cuenta, y pienso afrontarlo como un reto más y con ganas", añadió.
Por otro lado, Valverde, cuyo fichaje se hizo oficial el pasado lunes, se refirió al cambio de etapa tras cuatro años en Bilbao. "Me encuentro bien, aunque cuando te llama un club como el Barça siempre es un buen momento. Vengo después de estar cuatro años en Bilbao, en mi club, nos ha ido muy bien. Necesitaba cerrar una etapa después de cuatro años seguidos y a veces para que te llame un club como el Barcelona no sólo hace falta que les gustes como entrenador, sino que coincida el tiempo y que coincida el momento. En este caso ha sido el momento justo", indicó.
Además, el extremeño se refirió a su manera de vivir el fútbol. "Cuando eres entrenador no tienes más remedio que vivir de manera muy intensa, porque no te queda tiempo para nada más. El fútbol lo invade todo y sé que mi trabajo es estresante pero trato de aislarme aunque es muy difícil. Cada uno tiene su manera de dirigir y de vivir su profesión. Y luego hay una exigencia del trabajo que has elegido, que es apasionante, que nos encanta", indicó, antes de referirse a sus influencias.
"En este caso, José María Amorrortu ha sido una persona fundamental, porque fue lo que rápidamente me dijo: 'Tú debes ser entrenador'. Me fichó para las categorías inferiores del Athletic y allí he ido creciendo. He tenido la suerte increíble de haber tenido grandes entrenadores y después, al mismo tiempo, de vivir una época en que alrededor se han movido grandes técnicos y aprender de ellos y de compartir muchas horas con ellos. Desde Cruyff, Clemente, Heynckes, hasta entrenadores que ahora son contemporáneos míos, como Luis Enrique, como Pep Guardiola o Ancelotti", explicó.
Valverde no pudo quedarse con un esquema de juego sin ver primero cuál se encajará mejor a sus jugadores. "He usado un 4-2-3-1 o un 4-4-2, también usamos el 4-3-3, pero en el Athletic es más complicado. El esquema es importante porque marca tu idea, hay que acertar para que el equipo se encuentren cómodos", indicó.
"RECONOZCO QUE NO TRIUNFÉ COMO JUGADOR EN EL BARCELONA"
En el avance del viernes, Valverde analizó otros aspectos, como su pasado como jugador culé. "No fui un gran fichaje para el Barcelona, debo reconocerlo. Llegué con una lesión de rodilla, tuve una mala recuperación y me volví a operar. No triunfé como jugador. Ahora soy mayor, ha pasado el tiempo, tengo otra perspectiva y sé lo que exige ser entrenador de un club como éste", afirmó.
Con su ciclo con las botas puestas ya pasado, Valverde espera que su etapa como que entrenador "sea mejor que la de jugador" aunque destaca que "a pesar de todo se ganaron cosas", como fueron la Recopa de Europa 1989 y la Copa del Rey 1990.
"Un entrenador siempre quiere que su idea se vea reflejada en el equipo, ese espíritu de grupo se debe contagiar a la gente. El juego debe ser intenso, que intente llevar siempre el peso del juego y que tenga una ambición acorde a lo que se nos pide y a la que ya veo en el equipo", valoró sobre el estilo de juego que intentará imponer.