Al finalizar el encuentro se originó una trifulca entre futbolistas de ambos conjuntos
PORTO ALEGRE, 19 Ago. (EP/Reuters) -
Los jugadores del Guadalajara de México reconocieron que la interrupción del himno de su país durante la ceremonia previa al encuentro contra el Internacional de Brasil en la final de la Copa Libertadores, fue una "falta de respeto", que afectó al equipo y originó un altercado al término del encuentro.
En la final se impuso Internacional y al comenzar los festejos del equipo brasileño, jugadores del plantel mexicano se encararon a los locales, originándose una breve trifulca que obligó a intervenir a la policía.
El entrenador de Chivas, José Luis Real, reconoció que en el futuro su equipo debe estar preparado para soportar hechos como la interrupción del himno mexicano, que según afirmó sacó a sus jugadores del partido.
"Son cosas que sabíamos que iban a pasar, pero aquí parece que es normal y nos afecta. Tenemos que acostumbrarnos más a este tipo de situaciones para que no nos distraigan, pero no es un pretexto, Inter es un gran campeón", declaró el técnico al concluir el partido.
El delantero de Chivas Adolfo Bautista aseguró que el corte del himno mexicano en el Estadio Beira-Río encendió los ánimos de sus compañeros. "No respetaron desde el inicio el himno, y si no respetan como quieren que los respetemos", aseveró.
El jugador había mostrado su malestar desde el comienzo de la ceremonia y tras la interrupción de la canción nacional mexicana el delantero se marchó del campo con un visible gesto de enfado.
"No se vale la falta de respeto del equipo contrario, de los jugadores, de todos (...) Desde el inicio no respetaron el himno nacional, siendo que es un país entero el que lo está escuchando desde allá", afirmó a su vez el mediocampista Marco Fabián de la Mora.
El Internacional, equipo que dirige Celso Roth, se adjudicó su segundo título con tantos de los atacantes Rafael Sobis, Leandro Damiao y Giuliano, después de que en la ida se impusiese por 1-2. La vuelta se disputó ante unos 60.000 espectadores en el Estadio Beira-Río y contó con el arbitraje del colombiano Óscar Ruiz.