La Junta actual podría pedir una histórica acción de responsabilidad a Laporta y sus directivos
BARCELONA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, se enfrenta mañana a su primera Asamblea General Ordinaria de socios Compromisarios como máximo dirigente blaugrana en un clima tenso fruto de la guerra económica entre su Junta Directiva y la saliente, presidida por Joan Laporta.
Lejos de afrontar su primera Asamblea con tranquilidad, Rosell expondrá por medio de su vicepresidente económico, Javier Faus, los datos más relevantes de la ya famosa 'Due Diligence', una exhaustiva auditoría encargada a la agencia KPMG en la que se basan las acusaciones de gastos "excesivos" a la Junta de Laporta.
El ex presidente, que ayer se defendió con uñas y dientes asegurando que su gestión económica fue "impecable", con un cómputo positivo, podría pedir la nulidad de dicha Asamblea amparándose en el artículo 50 de los Estatutos del club, que permiten al presidente saliente o a alguien de su Junta defender la liquidación del pasado ejercicio.
Laporta, que no pretende asistir a la Asamblea, se guardó el derecho a ejercer la nulidad si lo que se diga mañana es, para él, una ofensa a su gestión, y por no ser sometidas a votación sus cuentas, que considera totalmente legales y auditadas. Por todo ello, el segundo punto del orden del día, en el que se mostrará el resumen de la 'Due Diligence', será el más esperado.
Por parte de la actual Junta, también hay bazas importantes en juego. Según la auditoría de Deloitte, encargada por Laporta y que, según explicó ayer, ha sido apropiada por parte de la Junta de Rosell pero con una nueva observación de las salvedades e incertidumbres, Laporta dejó el club en números rojos.
En resumen, se ha pasado de los 11,9 millones de euros de beneficio presentados por Laporta el 30 de junio, en su último día de mandato, a los 77,1 millones de pérdidas que señaló la Junta de Rosell auditoría en mano, con unas pérdidas totales superiores a los 40 millones en el global del mandato del ahora líder de Solidaritat Catalana.
Serán estos últimos números los que se sometan mañana a votación, por lo que si los compromisarios aprueban la liquidación del anterior ejercicio, aprobarán unas pérdidas por las que la Junta de Rosell podría pedir una acción de responsabilidad a Laporta y su última Junta Directiva, que comportaría una reposición de dichas pérdidas. Sin duda, sería histórico, pues nunca antes ha sucedido, ni siquiera cuando Laporta fue escogido presidente en 2003 y decidió no hacer lo propio con Joan Gaspart y sus pérdidas.
EL RESTO DEL ORDEN DEL DÍA, SIN SOBRESALTOS
Liquidación del ejercicio económico al margen, el resto de puntos del orden del día sí que serán más tranquilos. La Asamblea, que se celebrará de nuevo en el Palau de Congressos de Catalunya, tiene su primera convocatoria a las 9.30 horas y la segunda y definitiva media hora después.
Tras un informe inicial de Rosell, y el comentado y crítico segundo orden del día y la consiguiente votación de la liquidación del ejercicio económico 2009/10 --tercer punto--, se presentará el presupuesto para esta temporada, se atenderá a las propuestas de los socios, que deberán ratificar a los nuevos miembros de la Junta Directiva y Comisión Económica, y cerrará el orden el turno abierto de preguntas.