Goles con historia: La mano de Henry empuja a Francia al Mundial de Sudáfrica

   MADRID, xx (EUROPA PRESS)

   AUTOR: William Gallas.

   FECHA: 18 de noviembre de 2009.

   LUGAR: Stade de France (París).

   PARTIDO: Francia - Irlanda (1-1, partido de vuelta de la repesca para el Mundial de Sudáfrica 2010).

   CONTEXTO: Tras finalizar segundos del Grupo 7 de clasificación por detrás de Serbia, los de Raymond Domenech se vieron abocados a disputar la repesca para estar en el Mundial de Sudáfrica 2010; su rival, una Irlanda que había sido segunda en el grupo de Italia. Así, el primer choque se celebraría en el estadio Croke Park de Dublín, donde un gol de Anelka bastó al combinado 'bleu' para llegar con ventaja al segundo partido. Después de ser subcampeona en Alemania 2006 y caer en la primera fase en la Eurocopa 2008, Francia no podía permitirse quedar fuera de la cita mundialista.

   EL GOL: El incombustible Robbie Keane necesitó poco más de media hora para igualar la eliminatoria con un tanto que enmudeció a todo el Stade de France. El ambiente gélido se trasladó al campo, donde los jugadores galos no pudieron contrarrestar el empuje de los de Giovanni Trapattoni. El encuentro se fue a la prórroga. Cuando el marcador anunciaba el minuto 103, Florent Malouda puso un mal centro al área para Thierry Henry, que se valió de su mano para asistir a un William Gallas que anotó a placer. El colegiado sueco Martin Hansson no vio nada.

   ¿Y DESPUÉS?: La afrenta incendió Irlanda, que incluso amenazó con llevar el asunto a los tribunales; la FIFA, según desveló años después el presidente de la Federación Irlandesa de Fútbol, John Delaney, aplacó los ánimos con cinco millones de euros para evitar la denuncia. ¿Y en Sudáfrica? Todo empezó mal y acabó peor. Anelka tuvo que abandonar la concentración por un enfrentamiento con Domenech y Francia cayó a las primeras de cambio tras empatar con Uruguay (0-0) y perder tanto con México (0-2) como con la anfitriona (1-2) en la fase de grupos. Fue el fin de la 'era Domenech' y el comienzo de la etapa con Laurent Blanc, que solo duró dos años.