MADRID, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Tras la tranquilidad que se vivió por el fondo de la clasificación el año pasado en LaLiga Santander con los prematuros descuelgues de Deportivo de la Coruña, Málaga y Las Palmas, se espera que este año la batalla por lograr la permanencia sea más dura y agónica para, más o menos, la mitad de los equipos.
Los tres recién ascendidos, por lógica deportiva y económica, deberían estar en esta pugna por evitar volver a Segunda División. El Rayo Vallecano, campeón de LaLiga 1/2/3 el año pasado y dirigidos por Míchel, vuelven a Primera tras solo dos temporadas en el 'infierno' y dispuestos a mantenerse.
Los fichajes de los extremos Kakuta y Advíncula o la llegada de José Ángel Pozo alivian la dolorosa e inesperada marcha del centrocampista canterano Fran Beltrán al Celta o la del goleador Raúl de Tomás, de vuelta, de momento, al Real Madrid, una ausencia esta obligada a solucionar para tener el tan necesario gol.
Otro ilustre que vuelve es el Real Valladolid. El conjunto pucelano vivió un final de temporada tan sorprendente como positivo. Dirigidos por Sergio González desde abril, se consiguieron clasificar para el 'play-off' tras acabar quintos. Eliminaron a Sporting y Numancia para confirmar su regreso a la élite cuatro años después, pero ahora tendrán que reponerse principalmente a la marcha al Getafe de su 'pichichi' y máximo goleador de la División de Plata, Jaime Mata.
Quien debutará este año en Primera División será el Huesca, siguiendo la estela de Eibar, Leganés o Girona. El ascenso solo pareció peligrar al final de la campaña tras haber liderado durante gran parte del campeonato. La marcha del arquitecto Rubi ha sido solventada con un inexperto en los banquillos de Primera como es el exportero argentino Leo Franco. Los fichajes para no ser un espectador de lujo han sido de renombre: Pablo Insua (Schalke), Rubén Semedo (Villarreal), Axel Werner (Atlético), Samuele Longo (Inter) o Luisinho (Deportivo) entre ellos.
Con más opciones que estos tres, por simple conocimiento y experiencia de lo que es jugar en Primera, parten otros siete equipos. Algunos vienen de hacer un gran año pasado como el Getafe, el Eibar o el Girona y otros de tener un rendimiento más irregular como Alavés, Leganés, Levante o Espanyol. Cuando todo comience, eso sí, poco importará el pasado.
Por como desarrolló la temporada, quizás el Getafe es el menos indicado para estar en esta lista tras un retorno sólido donde quedó octavo a cinco puntos del sexto. Además, la continuidad de José Bordalás, más la llegada de goleadores como Mata y Sergi Guardiola suponen un extra para un equipo que defensivamente fue muy fiable, pero que le faltó gol el año de su regreso. Maksimovic, David Soria o Alejo llevan la ilusión azulona a tiempos pretéritos en los que paseaban por Europa.
Tampoco sería justo no hacer una mención especial al Eibar de José Luis Mendilibar. Aunque hayan perdido a varias piezas importantes como Inui (Betis) o Capa y Dani García (Athletic), el conjunto armero ha pescado en el filial del Barça (Cardona y José Antonio Martínez) y se ha llevado al ancla del Sporting Sergio Álvarez. La estabilidad fuera de casa les servirá para saber si apuntan a Europa o se quedan con el -gran- objetivo de la permanencia.
Por solera y tradición, el equipo más fuerte de todos es el RCD Espanyol. Empiezan nuevo proyecto de la mano del obrador del milagro del Huesca y con Joan Francesc Rubi, el conjunto periquito seguirá la senda de un juego vistoso. La baja de Gerard Moreno (Villarreal) la han solventado con Borja Iglesias, autor de 22 tantos el año pasado con el Real Zaragoza, pero debe por fin confirmar, después de varios fracasos, que esta sea la etapa donde el grupo chino Rastar empiece a conseguir los objetivos marcados cuando apostaron por el club barcelonés.
En esta pugna también estarán dos clubes que cambiaron de técnico durante la pasada temporada y que, a partir de ellos, el equipo terminó por obtener los resultados deseados. Al Alavés aterrizó Abelardo en diciembre, en posiciones de descenso, para finalizar más cerca de Europa que del descenso. En marzo fue Paco López quien se hizo con el Levante y alejó el peligro en las pocas jornadas en las que se hizo cargo, incluso rompiendo la condición de invictos del Barcelona de Valverde.
Ahora, ambos técnicos habrán tenido una pretemporada entera para cohesionar al grupo y elegir los refuerzos que más se ajustan a su idea. En los babazorros, el mercado ha dejado las salidas de Munir y Pedraza, entre otras, y las altas de Borja Bastón o el exótico Twumasi (Astana). Paco López volverá a contar con prácticamente el bloque con el que salvó con holgura a los grandotas el año pasado y donde se mantienen el 'Comandante' Morales, el macedonio Bardhi o el delantero Roger, ausente casi toda la última campaña por una lesión de rodilla.
Por último, dos entrenadores que han cambiado de entrenadores, cuyas figuras trascendían la parcela técnica. Asier Garitano (Real Sociedad) y Pablo Machín (Sevilla) ya no estarán en los banquillos de Leganés y Girona y esto, inevitablemente, cierra la etapa más gloriosa de ambos clubes.
La incógnita ahora es testar que pueden conseguir Mauricio Pellegrino, que ya demostró su trabajo en el Alavés al que llevó incluso a la final de la Copa del Rey, al frente de un 'Lega' que ha salvado con nota sus dos primeros años en la élite y que quiere aprovechar esa experiencia para evitar apuros después de una brillante primera vuelta firmada el año pasado y que no tuvo continuidad en la segunda, y un Eusebio Sacristán, que tras dejar la Real Sociedad tendrá que hacer olvidar en Montilivi a un técnico que llevó al equipo catalán al ascenso y a soñar incluso con Europa gracias en buena parte a los goles de Stuani y Portu.