MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
La futbolista española Jenni Hermoso insistió en que, "sin merecerlo", las integrantes de la selección campeona del mundo en el torneo disputado en Australia y Nueva Zelanda este verano sufrieron "más de la cuenta en un momento histórico", al mismo tiempo que destacó que España "no" ganó su primer Mundial "para alzar un trofeo" o "salir en portadas", sino porque "esa era la única manera para ser escuchadas, valoradas y respetadas".
"Sin merecerlo, sufrimos más de la cuenta en un momento histórico para nosotras, pero tengo claro que tenemos una responsabilidad grande con las nuevas generaciones. Y a todas esas personas que no tienen altavoz para hacerse escuchar, quiero decirles que esta lucha es de todos", expresó la jugadora esta madrugada en la gala del Salón de la Fama de la FIFA celebrada en México.
Al recibir un galardón que homenajeó su trayectoria en el Pachuca mexicano y con la selección, la campeona del mundo se dirigió a los presentes con un emotivo discurso en el que rememoró la noche del 20 de agosto, cuando bordaron la primera estrella para el combinado nacional femenino.
"Pude sentir la mano de mi padre cuando me llevó a entrenar, la sonrisa de mi madre al verme jugar y la alegría de toda la familia compartiendo el sueño de una pequeña futbolista que quería ser campeona del mundo. He jugado al fútbol toda mi vida, tengo 33 años, pero hace semanas sobre ese campo de esa final fui una niña otra vez", reconoció.
Para la madrileña, la selección española ganó el título, dio "la vuelta al mundo" y se convirtió "en uno de los mejores equipos de la historia", aunque apuntó que consiguieron "algo mucho más humano, más trascendental". "No fuimos campeonas para alzar un trofeo, que se quedaran en las vitrinas, recibir un bono de compensación o salir en portadas", dijo.
"Fuimos campeonas del mundo, porque esa era la única manera que nos quedaba para ser escuchadas, valoradas y respetadas. Mi selección nacional cambió la forma de ver el fútbol femenino de muchas personas", recalcó Hermoso, en referencia a los cambios que, desde la consecución del título, pidieron las jugadoras en la estructura del fútbol femenino federativo.
Así, la delantera cree que "millones de niñas en todo el mundo" se sintieron "identificadas y protegidas" por unas jugadoras "valientes, comprometidas y honradas", que miran por "el futuro" de las próximas generaciones. "Han pasado muchas cosas desde entonces, quizás sacrificamos alegrías o celebración", lamentó la jugadora, sobre el beso del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales.
"Ganamos dentro y fuera del campo para asegurarnos un deporte, y una sociedad inclusiva, que nos proteja a todos, y quiero decirle a todos que se acabó. Soy Jenni Hermoso, jugadora de fútbol y esa niña que logró ser campeona del mundo", zanjó.