MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Reacciones tras la sentencia del procés
LaLiga ha solicitado al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que el Clásico que deben disputar el FC Barcelona y Real Madrid el próximo 26 de octubre a las 13:00 horas en el Camp Nou se juegue finalmente en el Santiago Bernabéu, confirmaron a Europa Press fuentes de la patronal de clubs.
El organismo que preside Javier Tebas ha solicitado que se invierta el orden del calendario del Clásico, con lo que el partido de la segunda vuelta sería el fin de semana del 1 de marzo en la Ciudad Condal, aduciendo "causas de fuerza mayor", recogidas en los artículos 239, 240 y 188 del reglamento de la RFEF.
En el primero de estos artículos, el 239, se refiere, en el primer punto, que "no podrá autorizarse la suspensión y aplazamiento de un encuentro a fecha que suponga alteración del orden del calendario, salvo razones de fuerza mayor indubitadamente acreditadas o recogidas reglamentariamente".
Asimismo, en el 240.2, entre las razones de posible suspensión de un encuentro, figura la de "fuerza mayor", y el artículo 188 recoge que en este supuesto de "fuerza mayor o circunstancias excepcionales", la RFEF podrá "suspender total o parcialmente las competiciones", (...) con la Liga Nacional de Fútbol Profesional, cuando así resulte legalmente oportuno".
La actual situación que se está viviendo en Cataluña tras la sentencia del Tribunal Supremo (TS) sobre el 'procés' y la manifestación que está preparando el soberanismo el 26 de octubre para expresar su repulsa al fallo son los motivos que han impulsado a LaLiga a solicitar el cambio de fechas en el Clásico.
La RFEF ha confirmado que ha recibido la petición de LaLiga y que ha puesto el caso en manos del Comité de Competición, que a su vez "ha dado traslado de la situación" al FC Barcelona y al Real Madrid que tienen hasta el próximo lunes para presentar las alegaciones oportunas. "Una vez recibidas y analizadas, fallará Competición", apuntó la RFEF.
DECLARADO DE ALTO RIESGO
El Clásico ha sido declarado, como es habitual, como partido 'de alto riesgo' por la Comisión Antiviolencia, por lo que requiere de una mayor presencia de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en una jornada que se prevé complicada por la celebración de la manifestación soberanista.
Como se recordará, el FC Barcelona solicitó el aplazamiento de su encuentro con Las Palmas con motivo del ambiente de tensión que se generó por referéndum del 1-O de 2017, pero LaLiga consideró que no había motivos para que no se jugara el partido y éste finalmente se disputó (1-0) a puerta cerrada en el Camp Nou.