"La inestable situación indica que el proyecto deportivo no se puede llevar a efecto"
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El técnico español Marcelino García Toral ha dejado de ser este miércoles entrenador del Olympique de Marsella francés debido a las presiones ejercidas por medio de los ultras del club, que impiden que el preparador asturiano "pueda ejercer en buenas condiciones" su trabajo, tal y como ha informado el club francés a través de un comunicado.
Marcelino llegó al banquillo del Velodrome el pasado 23 de junio y, tras siete partidos oficiales dirigidos, no seguirá ejerciendo su cargo como primer entrenador del conjunto francés. Los acontecimientos se han precipitado tras las amenazas a la dirección deportiva del club llevadas a cabo en las últimas fechas provocadas por el irregular arranque de temporada del equipo, que no avanzó a la fase de grupos de la Champions y solo ha conseguido la victoria en dos de los primeros cinco partidos de la Ligue 1.
"El Olympique de Marsella considera que los acontecimientos del 18 de septiembre no permiten a Marcelino y su cuerpo técnico desempeñar en las condiciones adecuadas el papel para el que fueron contratados", comunicó la entidad en un escueto comunicado.
El conjunto marsellés confesó que "todo el club está muy decepcionado" por "afrontar la marcha" por motivos "extradeportivos" de un entrenador y un cuerpo técnico, que estaban "plenamente comprometidos con el club".
La decisión del club llega después de que la Junta Directiva, que preside el español Pablo Longoria, dejara claro este lunes que no aceptaría "amenazas personales" ni toleraría "ataques individuales" contra sus miembros por parte de los sectores radicales de su afición, lo que considera que no son "unas condiciones mínimas aceptables" para que prosiga en su trabajo de lograr que el club pueda alcanzar "el más alto nivel".
El propio Marcelino explicó sus motivos en un comunicado en las redes sociales, señalando a una "inestable situación" que "indica de forma clara, que el proyecto deportivo no se puede llevar a efecto". "Estábamos en el camino adecuado para conseguir los objetivos previstos y desde nuestra experiencia profesional sabíamos de la progresión del equipo, y la mejora era continua", dice el técnico.
En su comunicado, relatando los graves sucesos, el preparador español entiende que se vulneró "el obligado respeto a las personas y profesionales que dirigen el club". "La intimidación y los ataques individuales que han recibido el presidente y su Junta Ejecutiva, cuando el campeonato solo ha cubierto cinco fechas de competición, auguran días inciertos, donde las condiciones de trabajo no son las adecuadas para desarrollar nuestra profesión con seguridad y la normalidad en un club de fútbol", añade.
"El paso a un lado del presidente y de la Junta Ejecutiva, debido a las graves amenazas, injurias y calumnias que han recibido, unido al clima de tanta tensión al que se ha llegado en el corto espacio de dos meses, a pesar de estar realizando un trabajo muy profesional y con gran implicación de este cuerpo técnico, creemos que hacen inviable nuestra continuidad en el OM", lamenta.