ROMA, 26 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Gloria Moreno) -
Miles de seguidores del FC Barcelona y del Manchester United empezaron a invadir hoy las calles de la ciudad de Roma, donde ambos equipos se enfrentarán mañana (20.45 horas) en el Estadio Olímpico en la final de la Liga de Campeones.
Las autoridades italianas esperan la llegada de unos 30.000 aficionados ingleses y unos 20.000 barcelonistas, algunos de los cuales aterrizaron hoy en los aeropuertos romanos de Fiumicino y Ciampino a bordo de una quincena de vuelos chárter.
Sin embargo, la mayoría de los aficionados llegarán a la capital italiana mañana, el mismo día del partido, a bordo de unos 150 vuelos. Además, unos 1.700 seguidores del Barça llegarán por vía marítima al puerto de Civitavecchia.
Por el momento, el ambiente en las calles de la capital es sereno y tranquilo. A lo largo de la jornada, muchos aficionados se concentraron en la zona del Coliseo, donde las autoridades han dedicado un espacio al evento.
"Estamos muy ilusionados. ¡Vamos a ganar, vamos a ganar!" aseguraron en declaraciones a Europa Press Mercè i Jordi, dos aficionados del FC Barcelona que también están aprovechando este viaje para hacer un poco de turismo.
Una de las cuestiones que más preocupa a las autoridades son los seguidores que han acudido a Roma sin entrada o con entradas que podrían ser falsos, puesto que han sido comprados a través de canales no oficiales.
Tony es uno de los aficionados del Manchester United que ha llegado a Roma sin localidad. Aun con todo, explicó que no intentará entrar en el estadio y que se conformará con ver el partido en algún pub.
Se estima que el total de seguidores del Manchester que han acudido a la cita sin billete son unos 5.000, mientras que los barcelonistas serían sólo pocos centenares. De hecho, algunos aficionados se paseaban hoy por la capital italiana con camisetas en las que se leía 'I need a ticket for Champions League' ('necesito un billete para la Champions League').
Según los datos de la policía, ya hay quien ha intentado vender billetes por 3.000 euros. De hecho, los agentes identificaron a dos de ellos en las inmediaciones del estadio, donde se están intensificando los controles para evitar estafas a los aficionados.
Por su parte, la Prefectura de Roma ha decidido prohibir la venta de bebidas alcohólicas en cuatro barrios de la ciudad a partir de esta noche y hasta las 6.00 horas del jueves. Además de bebidas alcohólicas, tampoco se podrán adquirir botellas de cristal para evitar que puedan ser utilizadas como arma arrojadiza entre los aficionados.
El prefecto de Roma, Giuseppe Pecoraro, explicó que Roma no se convertirá en una "ciudad militarizada" con ocasión del partido. Aun con todo, "en estos días hemos estado trabajando para que un evento tan importante como este se desarrolle en el clima más sereno posible", señaló.
Los numerosos agentes de los distintos cuerpos policiales italianos que se desplegarán en la capital italiana contarán con la colaboración de una treintena de policías extranjeros -15 españoles y 15 británicos-, algunos de los cuales vigilarán las calles vestidos de paisano para informar sobre la presencia de grupos de seguidores considerados especialmente peligrosos.
Además del Rey Juan Carlos I, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, acudirán al estadio Olimpico el Príncipe William de Inglaterra y el subsecretario de Deportes británico, Gerry Sutcliffe. El primer ministro, Gordon Brown, en cambio, ha preferido no asistir.