El Real Madrid vence en Santander

Actualizado: domingo, 21 septiembre 2008 23:29

MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Real Madrid recuperó las constantes que le hicieron ganar las dos últimas Ligas en su visita a El Sardinero donde venció por 0-2 con goles de De la Red y Van Nistelrooy, en un partido perteneciente a la tercera jornada de la Liga BBVA, que dejó al Valencia como nuevo líder, algo que no se producía desde la temporada 2004.

El equipo que entrena Bernd Schuster se apoyó en un sensacional y valiente Gonzalo Higuaín, en el once de inicio junto con Van Nistelrooy y Raúl, intocable a pesar del debate a lo largo de la semana. Los merengues despejaron dudas, más por el resultado, que por el juego de toque que prometió el alemán, aún asignatura pendiente.

Higuaín fue vital con un autopase que culminó en las botas del canterano De la Red, quizá el mejor de los blancos. Éste no falló y de un punterazo subió el primero de la noche. El segundo fue de Van Nistelrooy, que desde el pico del área sacó un disparo seco para llevar la tranquilidad.

Algo que es familiar para los de la capital, que lo mejor que hicieron fue lograr dos goles, pues poco más tuvieron que celebrar después de que Guti, al borde del descano, se retirase por culpa del dolor que sufría en el gemelo de su pierna izquierda. El Racing pagó caro el esfuerzo europeo. Temporada difícil para los cántabros.

Por su parte, en Valencia viven tiempos felices, con Emery todo parece del color de rosa. Ante el Osasuna sumaron un triunfo (1-0) de los que hacen falta para estar arriba al final de temporada. El conjunto ché, por mediación de Mata --un valor emergente-- y de otro consagrado, David Villa, volvió a vivir una tarde plácida en Mestalla.

El tanto, que llegó en conexión asturiana en el minuto 83, premió la insistencia de los de la capital del Turia, que con otra filosofía ostentan el liderato de la Liga BBVA, aunque con los mismos puntos que el Villarreal, Almería y Espanyol, que ayer dejó escapar vivo al Getafe de Montjuïc (1-1).

El primero que le sigue, el Villarreal de Manuel Pellegrini, demostró que pudo obrar con eficiencia en dos escenarios bien distintos. Del empate (0-0) que le robó al Manchester en Old Trafford el miércoles pasado, a la trabajada victoria que sacó hoy en Los Pajaritos.

El 'submarino amarillo' comenzó perdiendo por culpa de un gol de Brit, pero el Villarreal supo reaccionar a base de buen fútbol como tiene acostumbrado. Un soberbio Cazorla empató el partido después del descanso y comenzó la jugada del segundo, que materializó Llorente --con gran calidad-- a 15 del final.

NEGREDO RELANZA AL ALMERÍA

Álvaro Negredo fue el máximo goleador de los andaluces la pasada campaña y en ésta tiene pinta de volver a serlo. Está claro que el delantero madrileño es un seguro de vida para el Almería que hoy venció al Málaga por 1-0 y mantiene la estela del Valencia.

El Almería va en silencio, sin llamar la atención, pero con la intención de firmar una temporada como la pasada. En el otro derbi andaluz de la temporada, los de Arconada se encargaron de machacar a un Málaga que aún no conoce la victoria tras su regreso a Primera.

En posiciones de UEFA o muy cerca se encuentran, tras esta tercera jornada, el Atlético de Madrid, que empieza a creérselo gracias al 'Kun' Agüero y a un Sinama que ha hecho olvidar la lesión de Forlán; además del Sevilla, que empató (0-0) ante un Betis que mereció más en la primera mitad.

Sin embargo, los béticos, que aún no saben lo que es marcar esta temporada, no acertaron a batir a Palop y ya rondan los puestos de descenso. Otro que no logra un gol es el Deportivo, que encadena tres partidos sin poder cambiar el cero de su marcador.

El choque ante el Villarreal, el del Brann noruego en UEFA, y el de hoy ante el Mallorca (0-0), han rebajado la euforia de los gallegos que se encuentran más cerca del nivel que mostraron la temporada pasada que al final de año, cuando Lotina cambió de principios.

Además, completó la jornada sabatina la primera victoria del Athletic en Liga ante el Valladolid por 2-0. Llorente con un perfecto cabezazo, e Iraola desde el punto de penalti --tras repetición por invasión del área-- tranquilizaron a Caparrós y a toda la parroquia bilbaína, que se despereza con todo merecimiento.