El Flamengo persigue 38 años después el mayor título de Sudamérica
MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El CA River Plate buscará reeditar este sábado (21.00 hora peninsular española) su título de la Copa Libertadores, en cuya final se enfrentará al Flamengo para decidir quién sale campeón de otra temporada polémica y teniendo como escenario el Estadio Monumental de Lima (Perú).
Disputada a partido único por primera vez en su historia, esta competición vuelve a cerrarse entre protestas. El año pasado, las trifulcas protagonizadas por los aficionados ultra de River Plate y de Boca Juniors propiciaron que el duelo de vuelta se jugara en Madrid, a 10.000 kilómetros de su Buenos Aires natal.
El estadio Santiago Bernabéu, ofrecido por el Real Madrid para tal excepcional ocasión, coronó finalmente a River Plate frente a sus vecinos bonaerenses. El derbi necesitó la prórroga y además puso el colofón a un torneo que para este 2019 ha querido aprender de sus errores.
Así, la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) se ha visto obligada por segundo año consecutivo a reaccionar por un clima de adversidad social. Previsto para jugarse en Santiago, capital de Chile, el encuentro definitivo por la Libertadores se tuvo que cambiar de ciudad tan solo 18 días antes de su disputa.
El Estadio Monumental U, habitual casa del Club Universitario de Deportes, albergará por tanto un duelo inédito en los enfrentamientos finales por el mayor título de Sudamérica. No en vano, el Flamengo tiene un único título en su palmarés, conquistado en 1981 ante el Cobreloa chileno.
Por su parte, River Plate pretende confirmar su reciente hegemonía en el continente sudamericano. Los pupilos de Marcelo Gallardo, con Enzo Pérez junto a Santos Borré y Lucas Pratto en sus filas, tienen ante sí la oportunidad de levantar el que sería su quinto entorchado histórico, tercero en los últimos cinco años.
Para colmo, Gallardo agrandaría su buen estatus como entrenador en caso de ganarlo otra vez. Si lo consigue, igualaría a Osvaldo Zubeldía, con tres Libertadores en su currículum; con ello, el 'Muñeco' se quedaría a una de las obtenidas por Carlos Bianchi, que levantó el trofeo una vez con Vélez Sarsfield y tres con Boca Juniors.
Precisamente, Boca Juniors ha sido el último club capaz de conquistar la Libertadores dos temporadas seguidas. Con Bianchi en el banquillo 'xeneize', las ediciones de 2000 y 2001 se tiñeron de azul y oro. Ahora, Gallardo está a un paso de que su rival acérrimo emule esa gesta y haga olvidar por un instante las malas noticias de Sudamérica.
Por su parte, el club brasileño dirigido por Jorge Jesús, ex del Benfica y muy acostumbrado a jugar finales, cuenta con un equipo reforzado este año con el objetivo de conseguir grandes metas. En sus filas milita el español Pablo Marí, que apenas hizo ruido en el Deportivo y está cuajando una gran competición, el veterano Rafinha -ex del Bayern- y los ex colchoneros Filipe Luis y Diego Ribas, entre otros.
En lo extradeportivo será una nueva final marcada por el contexto. Gobiernos depuestos, huelgas generales, reyertas, cargas policiales, etc. Las protestas en Santiago de Chile, donde los manifestantes tomaron las calles el pasado 17 de octubre por la cuarta subida del precio del metro en pocos meses, fueron solo otro síntoma del ambiente de tensión con el que la máxima corona de la Conmebol ha tenido que lidiar.