MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La UEFA ha admitido este domingo que hubo "problemas" para separar a los aficionados de Inglaterra y de Rusia en el partido que enfrentó a ambas selecciones este sábado en el estadio Vélodrome de Marsella, durante la Eurocopa de Francia 2016, y ha anunciado que se reforzarán las medidas de seguridad para próximos encuentros.
"La UEFA reconoce que hubo problemas de segregación en el Stade Vélodrome y aplicará las medidas necesarias para fortalecer el despliegue de personal de seguridad en los estadios, en estrecha colaboración con las autoridades locales", reza el comunicado del organismo.
Por los incidentes, el organismo rector del fútbol europeo informó de que se ha abierto un procedimiento disciplinario a la Federación Rusa de Fútbol (RFU). Entre los cargos, se acusa a los aficionados rusos de "tumulto en las gradas, encendido y lanzamiento de bengalas".
"La decisión sobre las sanciones impuestas se realizará en los próximos días, una vez que la RFU haya presentado sus declaraciones por escrito y pruebas", señala el organismo, que destacó que este comportamiento es "totalmente inaceptable y no tiene cabida en el fútbol".
Además de los alterados en el estadio, la UEFA condenó los violentos enfrentamientos que se produjeron en el centro de la ciudad de Marsella y en el Puerto Viejo, que se saldaron con varios heridos y un seguidor inglés en estado grave.