LONDRES, 30 Ene. (Reuters/EP) -
El entrenador del Arsenal, Arsene Wenger, ha declarado este lunes que todos aquellos que no le quieren pensarán que la sanción de cuatro partidos y una multa de 25.000 libras por empujar al cuarto árbitro en el Arsenal-Burnley (2-1) será una "sentencia demasiado indulgente" y que no estarían satisfechos ni aunque lo metieran en la "cárcel".
"Para aquellos que no me quieren, cualquier sentencia será demasiado indulgente y les gustaría ponerme en la cárcel en mitad del invierno sin nada", dijo Wenger ante los medios británicos.
Además, reiteró las palabras que dijo tras el encuentro, correspondiente a la vigésimo segunda jornada de Premier League. "Mi reacción (a la sanción) es la misma que dije después del partido. No quiero que se vuelva a dar esta situación. No voy a juzgar lo que dice el juez. No hay necesidad de volver sobre esto", agregó.