MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) - El entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, aseguró que más que tener el 'ADN' de la Liga de Campeones, trofeo que podría conquistar por cuarta ocasión en su carrera este sábado, tiene el del conjunto madridista, su "casa" y el club de su "vida", y afirmó que la final ante la Juventus será un partido "distinto" en el que nada tendrán que ver los números que hayan firmado uno u otro. "Tengo, seguro, el ADN del Real Madrid. Esta es mi casa, todos cuando llegué siempre han sido muy cariñosos conmigo y los valores los he defendido. Al final estoy viviendo algo espectacular y pase lo que pase siempre voy a ser aficionado suyo porque es el club de mi vida", expresó Zidane este martes en rueda de prensa durante el 'Media Day' del club. De todos modos, tiene claro que no sabe si ha dejado ya "huella". "No tengo eso en mi cabeza, las cosas van a pasar naturalmente como cuando era jugador. Disfruto porque sé que este momento se va a acabar, estamos a punto de conseguir algo extraordinario, pero no pienso en dejar huella en la historia", apuntó. Preguntado por los valores del club, 'Zizou' resaltó "la entrega, el hacer todo lo posible para ganar". "Me ha enseñado a dar todo lo que tienes, a que puedes jugar bien o mal, pero debes pelear y correr hasta el final", admitió, dejando claro que Sergio Ramos "representa muy bien esos valores y además es muy noble". Además, 'Zizou' remarcó que su política de rotaciones "sólo es una filosofía". "Era lo que quería hacer teniendo esta plantilla. Sabes como es el fútbol, puedes estar ahí y luego muy abajo, sólo intento ser positivo, dar lo mejor de dentro y darle dirección al equipo", opinó. "Tengo un año más, pero no significa nada, quiero estar aquí, pero depende de lo que haces en el campo. Creo que el club está contento con lo que estamos haciendo", añadió sobre su futuro. El francés reconoció que "todavía" nota la felicidad de haber ganado la Liga y que todos están "muy contentos por estar en la final de la 'Champions". "Sabemos las dificultades de llegar a una final, trabajamos muy bien todo el año y es merecido. El equipo llega bien, con confianza, muy bien físicamente y concentrados en lo que tenemos que hacer", subrayó. De todos modos, no escondió lo que rodea a una final. "Presión se nota más, seguro. Normalmente sois 25 aquí y ahora ves lo que significa este partido, pero es lo que nos gusta a todos, jugar finales", confesó ante una sala de prensa de Valdebebas abarrotada de prensa. Ganar el título le daría al club el primer doblete en casi 60 años. "Porque hemos creído en ello y porque estamos muy cerca de conseguirlo", aseveró a modo de razones para pensar en lograrlo. Zidane insistió que el sábado "lo más importante siempre es dar el cien por cien" y no cree que vayan a influir los números ofensivos madridistas ni los defensivos de la Juventus. "Es una final, puede durar 90 minutos o mas, es completamente distinto y lo que ha pasado no tiene nada que ver con lo que va a pasar. Creo que son los dos mejores equipos, ellos lo que hicieron también muy bien, será un partido muy interesante", puntualizó. El Real Madrid afronta el "partido más importante" de la temporada por ser el "último", pero lo prepararán "igual", advirtió su entrenador, que tampoco está preocupado por si Massimiliano Allegri juega con cuatro atrás o con tres centrales y dos carrileros. "No va a cambiar mucho, sabemos que son un equipo sólido y que saben perfectamente jugar de las dos maneras. Me interesa más como intentar hacerles daño", recalcó. "No creo que seamos propuestas diferentes ni que haya mucha diferencia", agregó, destacando del rival que todos "son muy buenos", pero que el argentino Paulo Dybala "seguramente es ofensivamente uno de los más fuertes". Zidane no cree que haya diferencia con el año pasado. "Hemos hecho la cosa más difícil que es llegar a la final. Ahora no hay favoritos, es 50-50 porque ellos son un gran equipo", prosiguió el exjugador, que terminó "jodido" tras la final perdida contra el Real Madrid de 1998 cuando militaba en una 'Juve' de la que guarda "bonitos recuerdos" que hacen que el partido sea "un poco especial".