MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
El piloto español de MotoGP Marc Márquez (Repsol Honda) se ha mostrado "satisfecho" pese a acabar séptimo la jornada de libres de este viernes en el Gran Premio de Austria, en la que probó "una configuración distinta a la del año pasado" con la que consiguió dar "un paso adelante en aceleración" y mantener un buen ritmo de carrera, aunque apuntó que deberá "seguir trabajando".
"Estamos satisfechos de cómo ha ido hoy. Hemos empezado el fin de semana con una configuración totalmente distinta a la del año pasado y ha funcionado bien. Definitivamente, hemos dado un paso adelante en aceleración y puesta a punto general de la moto", indicó Márquez, actual líder del Mundial con 154 puntos, en declaraciones facilitadas por su equipo tras la jornada inaugural en el circuito de Spielberg.
No obstante, el ilerdense reconoció que deberán "esperar y ver cómo va" el sábado, ya que "hay algunos detalles" en los que la escudería japonesa quiere "seguir trabajando". "Los demás también mejorarán, así que de momento estamos contentos con lo que hemos hecho y con nuestro ritmo de carrera", señaló el vigente campeón mundial, que acabó 7º en la tabla de tiempos a 6 décimas de la cabeza (Dovizioso).
Un puesto que no logró mejorar tras una salida de pista en la curva 4 que le obligó a ceder posiciones, y al que accedió sin montar neumático nuevo. "Al final de la segunda sesión, he decidido mantener el neumático medio trasero, para concentrarnos en preparar bien el domingo. La previsión meteorológica es que mañana puede llover, pero he decidido jugármela, porque quería preparar bien para la carrera", sentenció.