MONTMELÓ (BARCELONA), 8 (EUROPA PRESS)
El Gran Premio de Catalunya de motociclismo ha aterrizado ya este jueves en Montmeló con un debate abierto entre los pilotos, con sus detractores y defensores, sobre el nuevo trazado del Circuit de Barcelona-Catalunya, modificado a raíz del accidente mortal sufrido por el piloto balear Luis Salom hace un año y que deja un 'layout' más lento, más revirado pero a la par más seguro.
El nuevo trazado tiene una longitud final de 4.652 metros, sólo tres menos que los 4.655 metros del usado en la Fórmula 1, y en esta cita del Mundial de MotoGP se probará, en las tres categorías, de forma definitiva pese a que alguno pilotos y equipos ya hicieron sus 'pinitos' en el test de hace unas semanas.
Si algo une a los pilotos es que los cambios se han hecho por seguridad, para intentar evitar que se produzcan más accidentes como el que se llevó la vida del piloto español Luis Salom el año pasado. Pero, desde un punto de vista técnico y deportivo, son varios los detractores del nuevo trazado, empezando por un Jorge Lorenzo (Ducati) que ha señalado en varias ocasiones que beneficia a las Honda.
El actual líder del Mundial, Maverick Viñales (Yamaha), aseguró este jueves que por gustarle, le gustaba el trazado antiguo. "Pero después de lo que pasó no podemos volver a aquel trazado, se debe cambiar esa parte ya sólo por respeto", se sinceró el catalán. Tampoco se escondió su compañero, el italiano Valentino Rossi: "Me han dicho que la condición del asfalto es crítica, sobre todo en cuanto a agarre, espero que puedan hacer algo al respecto en el futuro".
Por su parte, Marc Márquez, a quien señalan como el gran beneficiado junto a Dani Pedrosa, negó que esta modificación beneficie a nadie, sino que es mejor para la seguridad de todos. "El otro era más natural, un circuito único. Ahora tiene como dos partes, es un cambio en dos curvas pero es un gran cambio. Paso a paso encuentras la mejor trazada, y es interesante averiguar cómo ir rápido. Es un cambio por seguridad, si beneficia o no, no hay gran diferencia", argumentó.
El Circuit anunció en febrero la finalización de las obras para la modificación de su trazado, ya de forma definitiva desde 2017 en adelante, para cumplir con el requerimiento de la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) y, en este GP de Catalunya, ya se verá un nuevo diseño que se asemeja al utilizado en la Fórmula 1 con una 'chicane' algo más adelantada y sólo 3 metros menos de distancia.
Como avanzaron en una comida con los medios de comunicación en diciembre de 2016 tanto el presidente del Circuit de Barcelona-Catalunya, Vicenç Aguilera, como el director general del mismo, Joan Fontserè, este mes de enero de 2017 se llevaron a cabo con éxito las obras y el nuevo trazado está listo para acoger competiciones desde febrero.
Un nuevo trazado para MotoGP que se asemeja mucho al de la Fórmula 1, dado que se ha utilizado la variante de los monoplazas en la curva CaixaBank (la número 10), la variante de la curva 13, más cerrada y lenta, y se usa una 'chicane' como se hace en la F1 (curvas 14 y 15), aunque la de las motos estará situada unos metros antes.
Con estos cambios, llevados a cabo por requerimiento de la FIM y que ya se utilizaron de forma provisional, con la 'chicane' de la F1, en el pasado GP de Catalunya de MotoGP tras el fatídico accidente que acabó con la vida del piloto español de Moto2 Luis Salom, en los segundos entrenamientos libres, se pretende dar más seguridad a los pilotos.