Grant Dalton: "Queremos romper ese estereotipo de que la vela es para ricos"

"Las cuotas de género es algo degradante, no es buena idea en la Copa América"

No descarta a Barcelona ni a Valencia para albergar la próxima edición, siempre y cuando ganen, aunque "el pueblo neozelandés" empuja para el regreso de la Copa América

MADRID, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El CEO de la America's Cup, Grant Dalton, defendió que una de las "misiones" de la competición, que se disputará en Barcelona en 2024, será "romper con ese estereotipo de que la vela es un deporte para ricos", al mismo tiempo que no confirmó si la Copa seguirá en la Ciudad Condal en la próxima edición y aseguró que las cuotas de género "no son una buena idea" en la disciplina, ya que las considera "degradantes".

   "Es verdad que será gratuito, como queremos que la TV sea en abierto, no nos da beneficio, supone costes. Uno de los éxitos para la vela en Nueva Zelanda es que se ha convertido en el deporte para el pueblo. Claro que la gente piensa que es un deporte de ricos, pero en España tenemos al misión de romper ese estereotipo de que es un deporte para ricos", explicó Dalton desde el NH Collection Eurobuilding de Madrid, en los Desayunos Deportivos de Europa Press, patrocinados por DAZN, Loterías y Apuestas del Estado, UnicajaBanco y Vithas.

   El neozelandés cree que es un objetivo viable gracias al "apoyo" de la ciudad anfitriona "y el Gobierno español". "Queremos que la gente viva una experiencia gratuita y aprenda. Democratizar la vela, pero también aprender, difundir las pequeñas embarcaciones para que los niños puedan interesarse en este deporte", agregó.

   Barcelona acogerá la 37ª edición de la Copa América de Vela, del 22 de agosto de 2024 al 20 de octubre, con el "objetivo" de "recuperar el legado de Barcelona 92". "La mayoría de deportes llegan y se van, no dejan nada atrás y el legado es sumamente importante, es fundamental. Una de las cosas que pasó en 1992 es que los voluntarios fueron una parte enorme del legado, el espíritu olímpico sigue fuerte. Nosotros ya tenemos mas de 3.000 voluntarios registrados y eso será importante para el legado", apuntó.

   "El segundo legado será contribuir a fomentar la sostenibilidad, fomentar el hidrógeno, algo que es importante para Barcelona. En la industria marina, parece que el hidrógeno se abre camino, más que los combustibles fósiles. Queremos fomentar este deporte a través de patrocinadores que quieren dejar ese legado también, fomentar la diversidad. Siempre hay que mirar más allá del título, los pilares que dejaremos atrás cuando nos marchemos y que quizá permanezcan durante bastante tiempo", defendió Dalton sobre el impacto que podría tener la prueba en la ciudad anfitriona.

   Sin embargo, se mostró "escéptico" con el impacto económico. "Estamos hablando de mucho dinero, no lo puedo juzgar, pero tiene un impacto significativo. 1.200 millones y 19.000 empleos es lo que se ha comentado, pero dudo que se haya sobrepasado, pero si estas cifras se registran, diría que el éxito ha sido enorme, gigantesco", deseó.

"LAS CUOTAS DE GÉNERO SON MÁS DEGRADANTES"

   En el terreno de la prueba completamente femenina en la próxima edición de la Copa América, Dalton insistió en que es partidario de "una competición solo de mujeres", porque no cree en las cuotas de género. "Me da la sensación que es algo más degradante, no es una buena idea. Hay tantas mujeres marineras que lo hacen tan bien... Son lo suficientemente buenas para navegar con estos barcos, están capacitadas para hacer los trabajos físicos, no veo que haya barreras", explicó.

   "Estamos orgullosos de ser los primeros organizadores de hacerlo de manera adecuada. No queremos ocultarlo, si lo hacemos es para que se vea", añadió sobre la prueba femenina.

Y para esto, las mujeres, y en categoría junior, se subirán en la Puig Women's America's Cup -donde competirán por primera vez 12 equipos femeninos de regatistas- a los AC40, embarcaciones "realmente veloces" que alcanzan los 90 km/h. "No son 'juguetitos', ni mucho menos", advirtió Dalton, que avanzó que los equipos de estos barcos voladores "se entrenarán desde julio del año que viene con uno de esos yates en el puerto", utilizando también un simulador.

"No es como la Play Station, pero es muy real, con los mismos botones, los mismos aspectos físicos. Así competirán de manera segura y más competitiva", dijo.

"LA GENTE DE BARCELONA QUIERE PONER DE NUEVO A SU CIUDAD EN LO MÁS ALTO"

Sobre el legado y la herencia que espera que deje la Copa América, no cree que sea "mayor que el de los Juegos de Barcelona de 1992. "No estamos intentando compararnos, sería muy inocente. La gente de Barcelona quiere poner de nuevo a su ciudad en lo más alto, se agarran al legado de los Juegos, pero esperamos que este renacimiento del espíritu de Barcelona nos ayude a cumplir ese deseo", auguró.

Así, apuntó que la asistencia de público, sin dar cifras, será alta, pese a la "resaca de los Juegos" de París, que finalizarán una semana antes. "Si eres de Nueva Zelanda, pensamos que el año que viene es el viaje que se hace una vez en la vida: Juegos y Copa. Es el final de vacaciones y nadie quiere volver a trabajar. Quizá es perfecto para la gente, le va a gustar y lo va a ver", aseguró.

"Se hace después de las olimpiadas y hasta el 20 de octubre, por eso tenemos esa cifra de audiencia y visitantes, por su duración. A Barcelona van muchos turistas en cruceros, que solo están cuatro horas, y el turista promedio está entre 1 y 2 días. Pero la gente que va a la Copa América se queda mucho más días, y esto mejora el turismo", agregó sobre los turistas que se acercarán a la Ciudad Condal con motivo de la prueba de vela.

Y para apoyar esa llegada de visitantes, la competición se ha encargado de "acelerar" las obras en el Port Vell, que acabarán "en julio del año que viene" para generar una infraestructura "increíble". "Nuestro trabajo es asegurarnos de que cualquier tipo de visitante viva una experiencia cuando llegue a Barcelona", señaló.

"Será interactivo, y por la gran profundidad del puerto podremos navegar cerca de la costa. Nuestra misión es crear un entorno para Barcelona y su turismo, para que puedan experimentar la Copa América y entenderla", reiteró.

Sin embargo, Dalton no pudo confirmar si la competición repetirá en Barcelona en la próxima edición, que presumiblemente se celebraría en 2027, sin descartar la 'candidatura' de Valencia, que ya la organizó en 2007 y 2010. "Sería incorrecto plantarme aquí y decir que sí, que va a ocurrir, porque el pueblo neozelandés quiere que volvamos. Pero para eso las circunstancias tienen que ser correctas", expresó.

"El equipo (el Team New Zealand, defensor del título) seguramente respondería en Barcelona, pero habría dos equipos nuevos, y ahora mismo la infraestructura solo puede albergar a cinco. No hay manera de acogerlos", comentó sobre Barcelona, antes de destacar Valencia como "un lugar magnífico". "Fueron fantásticos como anfitrión. No es razonable eliminar a Valencia del planteamiento", confesó, aunque la decisión "en firme" se tomará, si gana el Team New Zeland, "cuando acabe la Copa".

Finalmente, Dalton, CEO de la America's Cup, se describió como una persona "no muy relajada", tampoco en los despachos, en los que intenta contratar personas "mejores" que él, quien se centra en "gestionar la cultura" de la vela y el evento. "A otros consejeros delegados les preocupa contratar gente mejor que ellos, porque se sienten amenazados, pero eso mejora tu empresa y todo lo que haces. Mucha gente intenta entrar en el ADN del equipo (Nueva Zelanda), y lo más importante es crear esa cultura", zanjó.