Luna Rossa e INEOS, batalla final para retar al Emirates en la 37ª America's Cup

BARCELONA 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

La final de la Louis Vuitton Cup de la 37ª America's Cup de Barcelona arranca este jueves, tras unos días de descanso y de dar lugar a una Unicredit Youth cuya final también empieza este jueves, aunque los focos vuelven a situarse sobre el Luna Rossa Prada Pirelli italiano y el INEOS Britannia inglés, que empiezan un cara a cara final para ser el sindicato que rete finalmente al defensor Emirates Team New Zealand en la gran final por el título.

Los timoneles del INEOS Britannia, 'Challenger of Record' de la Louis Vuitton 37ª America's Cup, y del Luna Rossa Prada Pirelli de Italia, finalistas de la 36ª America's Cup en 2021, se reunieron este miércoles en el World Trade Center de Barcelona para calentar esta final de la Louis Vuitton Cup, de la que saldrá el 'Challenger' definitivo para la Louis Vuitton 37ª America's Cup Match contra el desafío neozelandés.

En esta final de la Louis Vuitton Cup, el primer sindicato que consiga siete puntos se asegura el puesto de 'Challenger' y levanta el nuevo y espectacular trofeo de la Louis Vuitton Cup, hecho especialmente para este nuevo capítulo de la colaboración de la 'maison' francesa con la America's Cup.

Sir Ben Ainslie y Jimmy Spithill, antiguos compañeros del equipo ganador de la Copa en 2013 y ahora rivales en esta edición, como timoneles del INEOS y del Luna Rossa respectivamente, protagonizaron la comparecencia previa al arranque de la final junto a Dylan Fletcher y Francesco Bruni, también timoneles de las embarcaciones británica e italiana respectivamente.

"La Louis Vuitton Cup tiene una gran historia en la America's Cup, y todos sabemos que como Challenger, si quieres llegar a la America's Cup, lo primero que tienes que hacer es llevarte este trofeo a casa, y eso es por lo que estamos luchando. Es una gran oportunidad para nuestros dos equipos y estamos muy ilusionados con lo que nos espera", comentó Ainslie.

Ni Gran Bretaña ni Italia han ganado la America's Cup. Y eso que los británicos iniciaron la competición en 1851. "Es una gran motivación, todos conocemos la historia de la America's Cup, nosotros somos una nación marítima muy orgullosa y técnicamente la America's Cup comenzó en aguas británicas alrededor de la Isla de Wight y como es sabido ya nunca la hemos vuelto a ver, así que esta es la motivación para nuestro equipo", añadió.

Por parte del Luna Rossa Prada Pirelli, que ha estado a punto de desafiar con éxito en las últimas ediciones de la America's Cup, se siente que esta vez está al alcance de su mano. Según Francesco Bruni, saben que en Italia la America's Cup es un "sueño". "Llevamos muchos años persiguiendo este sueño, incluso antes de que yo naciera. Ahora tenemos una oportunidad y tenemos que usar esta bala", comentó.

Jimmy Spithill dio contexto a la disputa de la Louis Vuitton Cup, hablando sobre el paso de los italianos y mirando hacia el futuro. "Venimos de una serie de semifinales muy dura en la que hemos tenido, creo, dos equipos muy igualados con los estadounidenses y nosotros. Los británicos han hecho un gran trabajo, con el salto que han dado desde la Regata Preliminar hasta donde están ahora, y espero una lucha entre dos equipos muy igualados", vaticinó.

Las previsiones apuntan, para el inicio de la final --previsto a las 14.10 horas de este jueves-- a un viento 'garbí' del suroeste de 15-17 nudos, pero el factor clave podría ser la ola, con una altura prevista de entre 0,9 y 1,3 metros del sur. Ben Ainslie lo ha resumido: "Tiene buena pinta, muy buena pinta, potencialmente en la parte alta. Hay un poco de incertidumbre en cuanto a la intensidad del viento y el estado de la mar, pero en estos momentos parece bueno para la regata, así que debería estar todo en marcha".

El primero en sumar siete puntos levanta la Louis Vuitton Cup y avanza al Match de la Louis Vuitton 37ª America's Cup. Hay mucho en juego, cada equipo quiere llegar más alto y no hay consenso sobre quién tiene más posibilidades. Esta podría ser una de las finales de la Louis Vuitton Cup más reñidas de la historia, el final perfecto para unas Challenger Selection Series espectaculares.