MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
El técnico portugués André Villas-Boas cambiará de deporte y afrontará el reto de competir en la próxima edición del Rally Dakar al volante de un Toyota Hilux, con su compatriota Rubén Faria como copiloto, confirmaron este miércoles los organizadores del 'raid'.
Villas-Boas es un apasionado de las motos y en su juventud participaba regularmente en el campeonato portugués todoterreno, y además, su tío, Pedro Villas-Boas, compitió en el Dakar en 1982, cuando la prueba discurría por África.
El entrenador, campeón de la Liga Europa en 2011 con el Oporto, contempló la posibilidad de celebrar sus 40 años participando en la 40ª edición con una moto, pero prefirió seguir las recomendaciones de su amigo Alex Doringer, director de KTM.
"Me comentó que necesitaría una preparación completa durante un año si quería conseguirlo y que era mejor que me orientara más bien al coche", apuntó. "Así que me puse en contacto con el Team Overdrive y voy a estar en la salida", añadió el portugués, que conducirá el 'pick-up' Hilux con el que el cataría Nasser Al Attiyah lograba imponerse en el Mundial.
Además, contará con la ayuda como copiloto de Ruben Faria, segundo en el Dakar 2013 en motos y que se retiraba de la carrera para sumarse a la dirección del equipo Husqvarna en 2017, pero sin dejar de lado totalmente su faceta de piloto ya que compite al volante de un SxS (Side by Side) en el campeonato portugués todoterreno
"Cuando André me llamó para proponerme que partiera con él, me lo tuve que pensar cinco segundos. Es un reto fantástico y creo que podemos hacer un buen Dakar, es decir, llegar al campamento todos los días y no
demasiado tarde", afirmó al respecto.