MADRID 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El pujante Carlos Alcaraz y un Rafael Nadal que exprime sus aparentes últimos momentos de tenis encabezan la delegación española de tenis en los Juegos Olímpicos de París, una disciplina en la que el deporte nacional ha conseguido 13 medallas, quedándose fuera del podio tan solo en una de los últimas nueve citas olímpicas.
El palmarés español arroja un total de 13 medallas, sólo superado por las 43 de Gran Bretaña (que compitió junto a Irlanda hasta 1920), las 39 de Estados Unidos y las 19 de Francia. Eso sí, de ellas los únicos oros españoles llegaron en la edición de Pekín 2008 con el triunfo individual de Rafa Nadal y en Rio 2016 donde el balear lo logró en dobles junto al catalán Marc López. El resto de medallas son 7 platas y 4 bronces, cuatro de ellas en poder de Arantxa Sánchez-Vicario, la más laureada del tenis nacional a nivel olímpico, y más de la mitad, siete, gracias a la modalidad de dobles.
Además, desde que volviera a ser deporte olímpico el tenis en Seúl, de las nueve ediciones que se han celebrado de los Juegos Olímpicos, la delegación española ha conseguido medalla en todos a excepción de Londres 2012, la última en Tokio, el bronce Pablo Carreño, de mucho valor y ante el serbio Novak Djokovic. Unos datos que convierten al tenis español en un valor casi seguro para lograr medalla, más en París donde acude con sus dos referentes, en una superficie, tierra batida, que es la predilecta, y en un escenario de grandes recuerdos como las instalaciones de Roland Garros.
En París, la gran baza del tenis español pasa por las raquetas de Carlos Alcaraz y Rafa Nadal. Ambos lideran una delegación de ocho jugadores --entre cuadro individual y dobles masculino y femenino-- junto a Pablo Carreño, Marcel Granollers, Pedro Martínez, Jaume Munar, Sara Sorribes y Cristina Bucsa.
En el cuadro masculino individual, el murciano espera redondear lo que están siendo unas semanas repletas de éxitos con una medalla olímpica a sus 21 años. Ganador de Roland Garros y Wimbledon esta temporada, es el gran favorito para hacerse con el oro, más aun al jugarse en las mismas pistas en las que conquistó el Abierto de Francia en el mes de mayo ante el alemán Alexander Zverev.
Los Juegos, el principal deseo del jugador de El Palmar, será un torneo muy especial para Alcaraz, porque, como ocurriera en el año 2008, puede emular a Nadal consiguiendo ganar Roland Garros, Wimbledon y el oro olímpico.
El balear, que jugará en París sus cuartos Juegos Olímpicos, tiene la opción de igualar a Arantxa Sánchez-Vicario como tenista español con más medallas olímpicas con cuatro, con la posibilidad incluso de ser el deportista nacional que más oros ostente, y de poner el mejor punto y final a su carrera, siempre y cuando no decida alargarla más al verse sensiblemente mejor a nivel físico que cuando retornó.
Para ello, debe lograr una de ellas en el cuadro individual, en una pista que se conoce a la perfección y que lo ha coronado rey de la tierra batida en 14 ocasiones. Nada es imposible para Nadal, que viene de afinar su puesta a punto con la final en esta superficie en Bastad (Suecia), y más en un torneo que se juega al mejor de tres sets.
La otra puede venir en la modalidad de dobles donde el de Manacor y Carlos Alcaraz formarán una pareja para la historia en París, donde tendrán que trabajar a contrarreloj para coger la mejor compenetración posible en una disciplina en la que el murciano no es excesivamente prolífico, pero donde contará con la experiencia de su compañero.
Su foto en lo más alto del podio es seguramente una de las más anheladas por el deporte español en los Juegos. Una instantánea que, por tenis, no es tan difícil que ocurra. Nadal ha demostrado a lo largo de su carrera que, pese a no jugar dobles de manera habitual, es un gran doblista, mientras que Alcaraz tiene características en su juego, como el saque o la volea, que se adaptan muy bien a la modalidad.
Además, la pareja formada por Marcel Granollers, número uno del mundo en el ránking de dobles junto al argentino Horacio Zeballos, y Pablo Carreño, pendiente todavía de su estado físico que le ha obligado a renunciar al cuadro individual, es una de las más completas, por lo que ambos podrían estar inmersos en la lucha por las medallas. Más teniendo en cuenta que no tendrán el desgaste de disputar al mismo tiempo el cuadro individual.
SORRIBES Y BUCSA ASPIRAN A BRILLAR EN DOBLES
Completan la participación individual masculina Jaume Munar y Pedro Martínez. El balear, actual número 59 del mundo, no está viviendo su mejor temporada, pero que el torneo se dispute sobre tierra batida le beneficia. Por su parte, el valenciano, que entró por la renuncia de Carreño, intentará aprovechar esta oportunidad después de ser semifinalista antes de la cita en la tierra batida de Hamburgo (Alemania).
Por su parte, en el cuadro individual femenino, la participación irá de la mano de Sara Sorribes y Cristina Bucsa. Sorribes, pese a no partir entre las favoritas, ha demostrado en numerosas ocasiones que es capaz de eliminar a cualquier rival, como ya hiciese en Tokyo 2020 donde se deshizo de la por entonces número uno del mundo, Ashleigh Barty, y, además, en tierra, eleva su nivel.
Bucsa, que llega a París en el puesto 61 del ranking WTA, dependerá de la dureza del sorteo para ir avanzando rondas, aunque ambas sí podrían tener sus miras en el cuadro de dobles tras ser ganadoras en mayo del Mutua Madrid Open, torneo de categoría WTA 1000. La castellonense y la santanderina juegan habitualmente dobles y se complementan a la perfección por lo que podrían ser un hueso duro de roer para sus rivales.
Por último, la pareja que formará en el cuadro de dobles mixto, que contará con 16 parejas, lo decidirán los seleccionadores nacionales David Ferrer y Anabel Medina durante el transcurso de los Juegos Olímpicos.
De todos modos, los objetivos de alcanzar la gloria en París no serán nada sencillos ya que prácticamente estarán los mejores y las mejores del mundo. En categoría masculina, el serbio Novak Djokovic, que busca el único gran título que le falta, la medalla de oro olímpica, el número uno del mundo Jannik Sinner, o el ruso Daniil Medvedev, o el alemán Alexander Zverev, amenazan a Alcaraz y Nadal.
Mientras, en el cuadro femenino, donde la principal ausencia es la bielorrusa Aryna Sabalenka, estarán la número uno del mundo y ganadora de Roland Garros, la polaca Iga Swiatek, la kazaja Elena Rybakina, la estadounidense Coco Gauff o la italiana Jasmine Paolini finalista esta temporada en Roland Garros y Wimbledon.