PARÍS 29 Ago. (del enviado especial de EUROPA PRESS, Ramón Chamorro) -
El tenis de mesa español no arrancó del mejor modo posible su andadura en los Juegos Paralímpicos de París y aunque estuvo muy cerca de sumar una medalla en la modalidad de dobles, terminó viendo como sus cinco parejas eran eliminadas de la competición, la última como compañeros de dos históricos como Álvaro Valera y Jordi Morales.
De las cinco parejas, seguramente la que lo tuvo más cerca y fue la que más dolor se llevó, fue la formada por Iker Sastre y Miguel Ángel Toledo en la clase MD4. Subcampeones del mundo en Granada en 2022, sabían que ganando su primer partido se aseguraban el bronce y lo rozaron con los dedos antes de que se les escapase.
El premio al final fue para los eslovacos Jan Riapos y Peter Lovas, que se impusieron en cinco apasionantes sets por 11-3, 12-10, 11-7, 12-14 y 11-8. Los españoles se rehicieron a un primer mal parcial y en el cuarto llegaron a tener dos bolas de partido con 10-8 que no acertaron a aprovechar. En el definitivo, igualdad máxima hasta el 7-6 a favor de Sastre y Toledo, un punto muy discutido que paró el partido durante más de cinco minutos, y del que se rehicieron los eslovacos para acabar llevándose el duelo.
"Llevábamos muchísimo tiempo preparando estos Juegos Olímpicos Estábamos muy bien situados y es verdad que nos ha tocado el partido más duro que nos podía tocar. Me siento decepcionado conmigo mismo, pero el deporte es así y una vez se gana otra se pierde", señaló Toledo tras la derrota.
El madrileño recordó que han podido conseguir medalla en otros torneos "a costa" de la pareja eslovaco. "Es una pena porque hemos tenido dos bolas de partido que no hemos sabido aprovechar, y eso escuece, es de esto que no dormirás bien hasta dentro de un tiempo", indicó.
Para Toledo, no había más presión de la normal salvo la "lógica de un partido de estas características porque ya sabes que te juegas una medalla". "Es un bajón muy gordo que con los días y con la semana tendremos que superar", admitió el español.
"Es que lo hemos tenido tan cerca, lo hemos casi acariciado, hemos tenido puntos de partido, no hemos sabido rematarlo y si no rematas un partido al final lo pagas con rivales tan duros, pero así es el deporte", expresó por su parte Iker Sastre.
El vasco aseguró que no les había "afectado" el perder el primer set de forma tan clara porque sabían que "iba a ser muy duro" y que podían "remontar". "Le hemos dado la vuelta, nos hemos puesto por delante y hemos podido cerrar el partido, pero no ha sido posible. En los últimos puntos han tenido un 'poquito' más de acción que nosotros y así ha sido", añadió.
Tampoco le fueron bien las cosas a Jorge Cardona y Ander Cepas, primeros favoritos en MD18 que no pudieron en octavos con los brasileños Luiz Felipe Manara y Claudio Massad (9-11, 11-9, 11-9 y 11-6), ni a un histórico José Manuel Ruiz, que participando en sus octavos Juegos cayó junto a Alejandro Díaz en MD18 ante la potente pareja china Lian Hao-Zhao Shuai por 3-1 (11-9, 11-8, 9-11, 11-2). Francisco Javier López y Eder Rodríguez no pudieron en MD8 con los tailandeses Wanchai Chawut y Yuttajak Glinbancheun, primeros favoritos, (11-2, 11-0 y 11-8)
ÚLTIMO PARTIDO DE MORALES Y VALERA COMO PAREJA
El pleno de derrotas lo completaron Álvaro Valera y Jordi Morales, medallistas de bronce hace tres años en Tokio, en la clase MD14 al perder contra los chilenos Ignacio Torres y Matías Pino en tres sets (11-5, 15-13, 11-6), en lo que fue su último partido como pareja tras más de dos décadas con innumerables éxitos.
"Ha sido el último partido con mi compañero después de 25 años y estoy agradecido de todos los éxitos que hemos tenido durante todos estos años", señaló Valera a los medios tras tocarles "vivir la derrota".
El sevillano confesó que tenía "varios recuerdos muy especiales" con Morales, pero que "si tuviera que destacar uno es aquella medalla de plata en Londres jugando contra categorías superiores y ganándole a China que eran los número uno en los cuartos de final en un partido épico".
"Quizás el mejor partido de nuestra vida, eso es un recuerdo espectacular que siempre cuando estamos en una cena se nos viene ese partido a la cabeza porque ganarle a China en nuestro deporte es como ganarle a Brasil en fútbol, así que fue espectacular. De hecho despidieron al entrenador chino después de ese partido", añadió con una sonrisa.
Por su parte, Jordi Morales admitió que han sido "25 años de grandes éxitos" y coincidió con su compañero en aquel partido de Londres ante China. "Fue un juego espectacular y este partido hoy no puede empañar ni mucho menos todo lo que hemos vivido estos años, todo lo que hemos conseguido y siempre lo bueno estará por encima", apuntó.
Sobre el partido, Valera reconoció que "después de la resaca emocional de la ceremonia, que fue algo maravilloso, increíble e inolvidable", les tocó empezar con un "sorteo un poco desfavorable" porque les tocó "la opción más incómoda". "Nos va muy mal en su forma de jugar y hemos empezado con sensaciones incómodas, ellos han empezado a jugar mejor a medida que ha ido avanzando el partido y en momentos clave han estado más cómodos y más acertados", comentó.
El catalán reconoció "un 'poquito' de pena" haber acabado así este largo periplo. "Nos han dominado de esta manera y nos han jugado un partido perfecto. Ya hace unos meses jugamos contra ellos y nos pasó lo mismo, no hemos sabido encontrar soluciones, así que nada, nos queda otra que felicitarlos", indicó.